Yo me autoinculpo

Lo de la autoinculpación abre un auténtico universo de posibilidades:

-Me autoinculpo por no solidarizarme suficientemente con los pacientes con hepatitis C a los que no se prescribe Sovaldi. Piden a gritos que se les administre el medicamento más eficaz contra esta dolencia. Cada día mueren en España 11 personas por hepatitis C. Me avergüenza nuestra pasividad ante tanto desespero.

-Me autoinculpo por los delitos cometidos por los sindicalistas de Arcelor Mittal condenados a cinco años y tres meses por los incidentes  durante la huelga general del 29-M. Al menos 300 personas están encausadas actualmente por incidentes en jornadas de huelga. Con la de corruptos que andan por la calle, sofoca tanta dureza contra los de abajo.

-Me autoinculpo por la indiferencia con la que aceptamos el nuevo aumento de desahucios. Sonroja oír a los unos decir que la crisis ya es historia y que la gente siga perdiendo sus hogares. Entre el 30 de abril y el 1 de junio de este año, se produjeron 18.749 nuevos desahucios. Estos datos no incluyen aquellos miles de casos en las que las propias familias ejecutadas deciden 'autodesahuciarse', por lo que no se acaba tramitando la orden de lanzamiento.

-Me autoinculpo por no darle la importancia que merece al hecho de que el 24,7% de los escolarizados catalanes abandonen prematuramente sus estudios. La cifra es superior a la media española y ostensiblemente superior al 12,9 de la zona euro. La falta de recursos de las familias y no disponer del material escolar adecuado son algunas de las causas del abandono. La crisis económica se ha convertido ya en una crisis social.

-Me autoinculpo por no haber leído todavía el Informe sobre Malnutrició Infantil a Catalunya, del Síndic de Greuges. Cifras impresionantes.

Vulnerabilidad vital

-Me autoinculpo por vivir en una sociedad que solo puede permitirse un aumento de dos euros para los jubilados.

-Me autoinculpo por haber normalizado el numero de parados que hay en España. Resulta inadmisible que convivamos tranquilamente con esta situación de vulnerabilidad vital. Resulta además escandaloso el ejercicio de maquillaje de las cifras con una evidente voluntad negacionista. Que si paro registrado, que si EPA, que si reformas normativas, que si los que se marchan... Vamos que desaparecen los parados por arte de magia grotesca.

-Me autoinculpo por nudismo informático y exhibicionismo en las redes sociales. Los archivos de la Fiscalía Anticorrupción han sido atacados. Por lo visto, la mafia rusa está detrás de este robo que afecta también a la Camorra, la mafia china, la Gürtel...

No acabaríamos de autoinculparnos por tanto y tantos. Injusticias de carne y hueso. Feliz año.