¿Y si Pujol hubiese elegido a Duran?

¿Y si Duran Lleida hubiese sido el sucesor de Pujol en lugar de Mas? En declaraciones a EL PERIÓDICO en diciembre del 2000, Duran dice: «Pujol actuará como hombre de partido y no por encima de los partidos. Es legítimo. Eso no quiere decir que Unió rompa si se impone que el candidato sea de CDC. Antepongo el criterio de país a una legítima aspiración. Pero esto no es síntoma de debilidad, sino de fortaleza, de persona que no tiene prisa».

Poco después Duran reconoce que Pujol ya le ha comunicado que su candidato es Artur Mas, entonces conseller de Economia y amigo de Jordi Pujol Ferrusola. Luego se conocieron las manipulaciones para rebajar a Duran en las tablas de las encuestas de valoración. En la misma entrevista, Duran se presenta como un corredor de fondo y deja claro: «Mi meta no es el 2003 o el 2007. No estoy en política para ser president, sino para intentar servir a un país».

Naturalmente, si Pujol hubiese optado por Duran el argumento de los últimos años habría sido distinto. Contra lo que piensan los crédulos, las diferencias personales generan distintos argumentos políticos. A algunos puede parecerles que lo que vivimos actualmente es un episodio inexorable y consustancial. No es así. Duran o Mas. ¿Qué elección era la buena? ¿Cuál de los dos era mejor candidato? Churchill dijo que «en la política, los tiempos son más importantes que en la gramática». Los tiempos y también los sujetos, podríamos añadir. ¿Recordamos a Roca?

Blanco o negro

La corpo-secessió mediática vende que estamos en épocas de blanco y negro y que Duran es la ambigüedad pura a la que ha habido que defenestrar. Aun así, el divorcio merecía mejor ceremonia. Que un Rull sea el que se haya encargado de la estocada final resulta innoble. Mas se lo pasó un poco bien sonriendo en la pitada del Camp Nou. A juzgar por su sonrisita, Rull se lo pasó un poco bastante bien diciendo que eso era el fin de CiU.

La turbulencia independentista ha demediado al PSC con la huida de los neosoberanistas, casi lo mismo en Iniciativa y ahora la dividida es Unió. Los que lo están disfrutando alegremente en Convergència parecen no intuir que son los próximos: Mas hará su propia lista y adiós muy buenas. Un De Gaulle bajito. Esperemos que tanto destrozo político merezca la pena. Duran sigue considerando que el ultimátum ha sido inaceptable y que su objetivo sigue siendo una consulta legal como única vía plausible.

Más ucronías: ¿Areilza en lugar de Suárez?, ¿Rato en lugar de Rajoy?, ¿Chacón en lugar de Rubalcaba? Si el pasado aburre, vamos al futuro. ¿Quién será el próximo presidente del Gobierno? ¿Y el del Govern? Hagan juego.