Una limusina para Bárcenas

Qué ilusión, qué alborozo, qué satisfacción les ha entrado a los de El intermedio (La Sexta) al enterarse de que Luis Bárcenas va a salir de la cárcel en breve. Mandaron a Gonzo con una espectacular limusina a las puertas del penal de Soto del Real, para arroparle y recogerle gloriosamente en su salida, y en el plató sacaron del almacén el famosísimo paso Luis del Gran Poder, Señor de las Tres Demandas, y lo sacaron en procesión con cante de saeta incluida. Hombre, lo de la limusina -llena de champán y puros, pintada con el rótulo «Bienvenido Mr. Barcenas», y con chófer traído expresamente de Suiza para que Don Luis se encuentre como en casa-; lo de esta fantástica limusina, les decía, ha significado un notable dispendio para La Sexta. O sea, que esta cadena ha sido justa. Nada cicatera. A este ilustre preso, El intermedio le debe gratitud eterna. Entró en prisión hace 19 meses. En aquella época, antes de estallar el caso Bárcenas, el programa se movía entorno al 8% de media de share. Hoy rozan el 14%. ¡Ahh! Una bendición es lo que ha sido este Luis del Gran Poder para El intermedio. Los subsiguientes casos de corrupción de criaturas del PP, también. Aquí lo tremendo es pensar qué ocurriría si llegase a la Moncloa un partido de izquierdas. Pongamos por caso, Podemos. ¡Ahhh! No sé si este admirable programa está preparado para hincarle el diente a los rojos, con o sin coleta. Quién sabe, quizá entonces en ese apasionante equilibrio que han conseguido en Atresmedia se cambiarían los papeles: es posible que entonces en A-3 TV pasasen al ataque mordiendo a los nuevos mandatarios izquierdosos, mientras La Sexta se transformaría en un apacible balneario y harían posturitas, inofensivas y espumosas. No quisiera concluir el tema Bárcenas sin señalar lo que advirtió la periodista Marisa Gallero en Al rojo vivo: «Según figura en el auto, Bárcenas está en el PP en calidad de trabajador en excedencia. O sea, que en cuanto salga podría pedir la reincorporación a su puesto de trabajo». ¡Ahhh! Ese sí sería un golpe glorioso. En El intemedio batirían sus propios récords.

NICOLÁS .- Al pequeño Nicolás le metieron el martes en ese programa que va mal y que se llama Todo va bien (Cuatro). Esperaban obtener una gran audiencia. Pero siguieron mal: no pasaron del 4,5 de share. Se confirma lo que ya ocurrió el sábado en Un tiempo nuevo: el pequeño Nicolás se hace cada vez más pequeño.