Ideas

Una factoría de sorpresas

JORDI PUNTÍ

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Como estoy fuera de Barcelona, este año no podré ir a la feria del libro de segunda mano del paseo de Gràcia -la misma que el gremio, con coquetería, prefiere llamar «feria del libro de ocasión, antiguo y moderno»-. Me sabe mal, porque cada año encontraba alguna rareza, alguna sorpresa, Es cierto que últimamente había disminuido el número de puestos, e incluso había momentos de déjà vu grotescos: libros que uno había visto el año anterior reaparecían exactamente en el mismo sitio y el mismo orden. Señal de que el mercado no se mueve mucho. Por lógica, lo más normal sería que en tiempos de crisis aumentara el interés por las ofertas y los libros más baratos, pero la cosa no va así: aunque la gente compra menos libros que antes, no es solo por razones económicas.

Muchos libreros se quejan de las tarifas por un puesto en la feria. Si charlas con ellos, la mayoría te dice que el negocio hoy está en internet, donde los clientes buscan el libro especializado, no regatean y se ahorran el viaje. Es cierto, además, que con un poco de maña en internet se encuentran ediciones descatalogadas, o firmadas, a precios asequibles. Pero no es menos cierto que el coleccionismo puede ser muy aséptico y a veces cae en una devoción por el objeto muy poco literaria.

Atrapados en las dudas del mercado, en Barcelona todavía sobreviven varios libreros de viejo, no muchos. Cuando pienso en el espíritu de la feria, me vienen a la memoria Mercè Gil y su tienda, Books Factory. Este almacén de la calle Secretari Coloma, 33, aun conserva una apariencia de bazar: libros amontonados por todas partes, estanterías hasta el techo, títulos ordenados por género, pero todo con un aire caótico, que te empuja a la aventura de curiosear. Como la feria me pilla en Nueva York, es probable que me contente yendo al templo del libro de ocasión de aquí, el famoso Strand. Sus anuncios dicen que tiene unos 28 kilómetros de estanterías. En Books Factory no hay tantos, pero es la misma sensación monumental, a escala reducida.