Una Barcelona de distintas velocidades

El Informe sobre la Renta Familiar Disponible, que edita anualmente el Ayuntamiento de Barcelona y cuyos resultados se hicieron públicos la pasada semana, solo recoge lo que cualquier ciudadano podría comprobar en directo paseando por los distritos de la capital catalana. La crisis ha ensanchado las diferencias históricas entre las zonas de la ciudad. El informe se desarrolla a partir de indicadores como estudios, precio de la vivienda de segunda mano, compra de nuevos vehículos y su potencia, y tasa de paro. Así, el distrito de Sarrià-Sant Gervasi cuenta con la mayor renta familiar per cápita, y el de Nou Barris, con la más baja. Y si hablamos de barrios, Pedralbes (del distrito de Les Corts) y Trinitat Nova (Nou Barris) son mundos opuestos. Y no se trata de diferencias en inversiones municipales, que se han hecho en la mejora de infraestructuras de las zonas más deterioradas. Se echan en falta políticas sociales que contribuyan a aliviar el paro que inunda los barrios pobres.

Es en estos lugares de la ciudad donde se corre también el riesgo del desarraigo por la falta de vida comercial y la ausencia de equipamientos, pero también por una pérdida de identidad con el aluvión inmigratorio de países muy diversos. Los alquileres y los precios más bajos de la vivienda han actuado, en ese sentido, como un imán en los últimos años. Para evitar que se cronifiquen estas diferencias, solo cabe dejar de lado la resignación y actuar de forma decidida con las políticas sociales y recursos que sean precisos.