Peccata minuta

Un hombre llamado Chen Yuntao

JOAN OLLÉ

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En una de sus canciones, Jacques Brel cantó la nostalgia de aquellos tiempos en que, siendo caballo, arrastraba felizmente el landó de su 'jolie madame' por las calles de Burdeos; pero la 'madame' se enamoró de él, le obligó a separarse de su yegua y, por amor, tuvo de descaballizarse y reconvertirse en humano. Y todas las noches -sigue Brel-, envuelto en sábanas de hilo, echaba terriblemente de menos su establo y su paja.

Si esto ocurría en Burdeos, en la ciudad china de Hefei sucede exactamente lo contrario: también por amor, un ser humano trabaja varias horas al día como caballo. Chen Yuntao, de 38 años, se construyó una cabeza de cartón y, arrodillado en la calle, ofrece sus servicios equinos, como un tristísimo hipódromo, a cambio de cinco yuanes, el equivalente a 75 céntimos de euro. Nuestro hombre lo vio desesperadamente claro: «Si en los pueblos los niños pagan por montar caballitos, pensé que podría disfrazarme de caballo y ofrecer paseos para recaudar dinero para mi hijo». Chen no dispone de silla de montar, de vara, de riendas ni de estribos, pero sí de un hijo de 9 años, Chen Minghao, aquejado de leucemia, así como de una astronómica deuda con el estamento médico que atiende al pequeño que en el 2013 pudo dejar el hospital, pero poco después el cáncer volvió a él.

133.333 cabalgaditas

El diario 'The People's Daily Online' cuenta que la muy humilde familia ha abonado ya 30.000 euros, debe aún 24.400 y que el tratamiento para el próximo curso les costará entre 60.800 y 76.100 euros más. Total, 100.000, que divididos por 0,75 euros por paseo, da la friolera de 133.333 cabalgaditas. Hechos los números, vemos que a 33 servicios por día, esto en 10 años queda resuelto.

Chen Yuntao ha tenido mucha suerte, porque desde que ejerce su nuevo oficio ninguno de los transeúntes y posibles jinetes se ha montado a sus lomos y le han obligado a trotar a los acordes del '!Arre, arre, caballito!', limitándose la buena gente a depositar una limosna a sus pezuñas. Y también ha tenido la enorme fortuna de aparecer en muchos periódicos al lado de personalidades del mundo mundial.

Sin ir más lejos, en EL PERIÓDICO compartió honores, entre otros, con Gisèle Bündchen, Carmen Sevilla, Messi, Neymar, Suárez, Luis Enrique, Putin, Sarkozy, Maduro, Rato, Montoro, Felipe VI Letizia, quien, mira por donde, acaba de estrenar una tiara realizada en oro blanco, con 450 brillantes engarzados, 10 perlas australianas y un broche de la flor de lis, regalo de su esposo hace ya seis años, valorada en 50.000 cucas y que hasta ahora, por aquello de la mujer del César, la Reina había preferido no lucir en público. Vuelvo a sacar cuentas: 66.666 trotecitos.