'The day after'

¿Sobrevivirá el independentismo al ‘processisme’? Esta es la gran incógnita en el tablero catalán. El sueño húmedo de los inmovilistas es que el paisaje tras la intentona del referéndum unilateral sea como el de la famosa película futurista, 'The day after', donde aparecían las calles desiertas de Kansas tras un ataque nuclear soviético. Se imaginan una Catalunya libre de independentistas donde el catalanismo volverá sumiso al 'peix al cove' como si todo hubiera sido una fiebre amarilla alimentada por la trama del tres por ciento. Las premisas de esa hipótesis es que los restos de Convergència, refugiados en el PDECat, serán testimoniales en unas hipotéticas elecciones de nuevo autonómicas y la Esquerra de Junqueras liderará la nueva etapa, pero condicionada por el nuevo partido de los Comuns que le retendrá en la estación referéndum como el PSC retuvo a la Esquerra de Carod y Puigcercós en la estación federal del Estatut que acabó en sonoro fracaso.

Los sueños por muy húmedos que sean, sueños son. Hacer escenarios de futuro en Catalunya pasa necesariamente por imaginarse cuál es la escena final del capítulo actualmente en emisión. Nada será igual si el referéndum deja de celebrarse por desistimiento de sus impulsores o por imposición de sus detractores. Como en el capítulo final de una de las temporadas de la serie 'Dallas', tenemos a todos los protagonistas a bordo de un avión que va a estrellarse y será el dedo divino de los guionistas del 'procés' el que determine quien mantiene, adquiere o pierde protagonismo en la siguiente temporada. La intención de Puigdemont y Junquerasde hacer firmar el decreto de convocatoria a todo el Govern o las posibles autoinculpaciones de los parlamentarios si se inhabilita a la presidenta Forcadell podrían dejar las listas lectorales como las calles de Kansas tras la explosión nuclear. Atentos pues a los movimientos de estos días. La nueva dirección del PDECat no quiere darlo por muerto y alienta su rearme ideológico marcando perfil propio dentro de Junts pel Sí. Marta Pascal tiene claro que en cualquier escenario del día después solo sobrevivirán los que tengan un guion que interpretar. Y los exconvergentes no se quieren quedar sin.