Lo solidario es pagar entre todos

El autoconsumo eléctrico y la regulación del mismo que ha abordado el Gobierno ha dado pie a todo tipo de interpretaciones sobre el interés económico (o no) del mismo, quienes podrían convertirse en autoconsumidores y las implicaciones de todo tipo que esto supondría, en especial, en lo que se refiere a los costes del sistema eléctrico.

Debatir todas las afirmaciones realizadas sobre este tema consumiría demasiado espacio, así que me centraré en explicar por qué lo solidario es que los autoconsumidores contribuyan, como lo hacemos todos los demás consumidores, al sostenimiento del sistema eléctrico.

Una aclaración inicial. Las empresas eléctricas consideran que si alguien desea ser un robinsón energético y vivir desconectado de la red puede hacerlo y no tendría sentido que pagase ningún peaje por la misma. Es como si alguien decide buscar agua en su huerto y no conectarse a la traída general; en ese contexto no tendría sentido que pagase por las tuberías del agua.

Volvamos a la electricidad. Si la persona que ha decidido convertirse en autoconsumidor y puede costear la instalación del sistema (más de 20.000 euros para un hogar con 10 kW de potencia, además de contar con los metros cuadrados necesarios -en el ejemplo más de 70-) quiere, pese a todo, seguir enganchado a la red, tendrá que costearla. Esto es así de simple.

Contar con la posibilidad de utilizarla cuando no tenga capacidad de generación propia, tenga algún imprevisto, necesite potencia adicional o le salga más rentable, tiene un coste y ese coste debe pagarlo quien quiere disfrutar de la ventaja de estar conectado a la red.

Si, por la razón que fuera, los autoconsumidores no tuvieran que pagar este cargo, el coste se lo estaríamos financiando el resto de los consumidores, lo que me parece un caso de solidaridad mal entendida.

Otra pregunta, ¿deben contribuir los mencionados a financiar los costes generales del sistema eléctrico? La respuesta es que sí. Y la respuesta es afirmativa por idéntico motivo al anterior. El conjunto de los consumidores, que es tanto como decir el conjunto de los españoles, pagamos al año unos 11.000 millones de euros para financiar, entre otros conceptos fijados por ley, las energías renovables, entre otras, la solar fotovoltaica.

Ante esta realidad, ¿se debe tratar a todos los autoconsumidores de igual manera? Creo que no y tiene sentido distinguir entre aquellos que solo buscan el autoconsumo doméstico y quienes pretenden establecerse bien como generadores, bien como inversores para ahorrar en la factura de su empresa.

La potencia media contratada por hogar es de 5,5 kw, así que si se habla de liberar de peajes a consumidores de hasta 10 kw se estaría estableciendo margen más que suficiente para que el verdadero consumidor doméstico estuviera siendo favorecido en este caso.

Si los grandes autoconsumidores no asumieran su parte, tal como pretenden, resultaría que el resto de los españoles deberíamos hacernos cargo de su parte y pagarla. Para que ellos no paguen estos peajes, todos deberíamos pagar más. A mí este razonamiento también me parece de una solidaridad mal entendida.