LA CORTINA DE HUMO

Sintonía con los tiempos

TONI AIRA

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Nunca llueve a gusto de todos, y menos en política. Y menos aún si hablamos de los compañeros de partido. Y es que, esta semana el conseller de Territori y Sostenibilitat, Santi Vila, ha sido protagonista por unas declaraciones que dejaron a pocos indiferentes. Cuando dijo que se siente más cerca de Oriol Junqueras que de Josep Antoni Duran Lleida, el teléfono del conseller empezó hervir, con mensajes de apoyo (y no tanto).

Algún destacado militante convergente lo celebró porque «a menudo Artur Mas no tiene quien lo defienda». Otros calificaron de «muy bien hecha» la defensa que Vila hizo de su líder hace una semana y en la entrevista radiofónica donde hace unos días se sinceró. Y en más de un caso se contrastaba su reacción con la del coordinador general del partido ante el hecho de que ERC forzara la comparecencia de Mas en la comisión del caso Pujol («Y Josep Rull, ¿dónde estaba?»). Otros apuntaban el acierto en el tono, en contraste con la primera reacción del conseller Francesc Homs vinculándolo al cuestionamiento de las elecciones plebiscitarias. En la base del partido, además, y camino de las municipales, la reacción fue positiva ante un convergente «cantndo las cuarenta» a ERC. Pero nunca llueve a gusto de todo el mundo, evidentemente.

«Ante la tesitura de si se encuentra más cerca de Duran o de Junqueras, le faltó decir que es más de Mas», se ha oído en palacio. Pero Vila, hábil y con voluntad de marcar perfil propio, ha conseguido, de una tacada, emitir un triple mensaje: que es leal a Mas como el que más, que no es «el Duran de CDC» y que es independentista, eso sí, «instrumental», ahora y por pragmatismo. Pero, por encima de todo, quiso proyectar una idea: no está de acuerdo en todo con Junqueras, pero tiene una sintonía sobre hacia dónde va el mundo. Una sintonía con los tiempos que una nueva generación convergente está poniendo en práctica en el mundo municipal de donde proviene el conseller, que fue alcalde de Figueres.

En la competición municipal, además del factor soberanista, un grueso de candidatos convergentes reivindicarán el trabajo hecho (pragmatismo) y el factor generacional de los jóvenes alcaldes que lo empezaron a ser hace cuatro años, también con un nuevo lenguaje. En las encuestas internas de CDC, el alcalde de Igualada, Marc Castells, destaca en el aumento de intención de voto. Y otros como el alcalde de Girona, Carles Puigdemont, confirman la regla y una cierta sintonía con los tiempos que va muy buscada.