Rebajas en alza, otro indicador optimista

Las rebajas de verano concluyen oficiosamente hoy en Catalunya con una generalizada sensación optimista en el sector. En julio las ventas aumentaron un 4,2% respecto del mismo mes del 2014, y se prevé que en agosto el crecimiento haya sido similar. Y pese a que el abanico de establecimientos es muy amplio tanto en tamaño como en tipología, las estadísticas que maneja la Confederació de Comerç de Catalunya indican que este ascenso de las ventas ha alcanzado a gran parte del sector: dos terceras partes. Si se une este dato al de que el comercio minorista lleva 11 meses seguidos aumentando las ventas, la conclusión es que, efectivamente, los españoles ya consumen más que en los momentos más duros de la crisis. Un buen barómetro tanto de que tienen algo más de dinero para gastar como de que tienen más confianza en el futuro. Aunque ha sido muy modesta, la reducción de las retenciones del IRPF ha contribuido a ese aumento de la liquidez disponible por los particulares, a lo que también ha ayudado en las últimas semanas el notable descenso del precio de las gasolinas. A nivel macro, esta dinamización de la economía se refleja en el incremento del PIB y la reducción del paro, que es, al fin y al cabo, el objetivo esencial para que el crecimiento sea sano y alcance a la mayor parte de la población. En el comercio catalán, el empleo aumentó el 1,1% en julio, y aun sin entrar a analizar la calidad de los puestos de trabajo creados, este es el dato positivo que conviene retener.