Al contrataque

Que no cumpla

El problema no es Trump. O no solo. Le han votado más de 60 millones de personas, muchas de las cuales esperan que haga lo que prometió

Trump posa en su oficina a bordo del Air Force One, en la base aérea de Andrews (Maryland), tras regresar de Filadelfia, el 26 de enero.

Trump posa en su oficina a bordo del Air Force One, en la base aérea de Andrews (Maryland), tras regresar de Filadelfia, el 26 de enero. / periodico

ANA PASTOR

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Se cumplen los peores presagios.Y miramos ahora hacia Francia con pavor. Y de nuevo surgen voces optimistas que apuntan a que allí las cosas serán diferentes a lo ocurrido en Estados Unidos. Son quienes afirman que el sistema a dos vueltas impedirá que Marine Le Pen se haga con la presidencia de la República y se instale en el Palacio del Elíseo. Pero claro..., lo mismo se dijo sobre Donald Trump que, recordemos, ganó unas elecciones tras vencer en unas primarias en el Partido Republicano a nada menos que 11 candidatos. Y ahora casi todos deseamos que sea el único político que no cumpla sus promesas electorales, que incumpla las 280 medidas prometidas por el nuevo presidente de Estados Unidos en la campaña.

Como recuerda 'The Washington Post', más allá de esas afirmaciones hechas al calor de los mítines, Trump firmó después algo que denominó «contrato con el votante americano» que incluye 60 medidas concretas que quiere poner en marcha desde el primer minuto. Este periódico va a hacer un seguimiento continuo de su cumplimento, un método ya aplicado a Barack Obama (aquí en España el equipo de 'El Objetivo' está haciendo ese mismo trabajo con el pacto entre Partido Popular y Ciudadanos a través de 'El Pactocheck').

El caso es que Trump, según este medio, en la primera semana ya ha cumplido tres de sus promesas y entre ellas no está la construcción del muro en la frontera con México. Son: congelar la contratación de funcionarios públicos, la ruptura del acuerdo comercial del Pacífico y poner en marcha de nuevo el proyecto que pararon Clinton y Obama de hacer un oleoducto al norte del país.

En la lista de lo prometido en campaña encontramos además cosas como "no volver a comer galletas Oreo" hasta que la producción de esa empresa se traslade al completo a Estados Unidos, "no voy a coger nunca vacaciones", "mantener abierta la prisión de Guantánamo" y alguna cosa más grave como "eliminar" a los familiares de los sospechosos de posible vinculación al Estado Islámico. Al leerlo he dudado dos veces. "Eliminar". Y dos veces más he comprobado que lo dijo tal cual en una entrevista que recoge CNN.

VOTOS Y PROMESAS

Quizá es demasiado tarde para hablar de todo esto. Quizá ya no sirva para nada porque ya tiene el poder de cumplir lo prometido. El problema no es Trump. O no solo. Le han votado más de 60 millones de personas, muchas de las cuales le escucharon prometer todo esto. Y ahora además esperarán que cumpla. Más de 60 millones de personas que vieron cómo se reía de una persona discapacitada o cómo insultaba a las mujeres. Como dice una amiga mía no os empeñéis en buscar a alguien peor que Trump que, de momento, ya tenemos suficiente.