Puñalada a Lorenzo

Ha podido más la imagen de marca que las carreras. Ha podido más mantener al ícono mundial vestido de Yamaha que la competición. Ha podido más retener al ‘dios’ de las dos ruedas que construir el futuro. Aquellos que anunciaban un Mundial de MotoGP complicado, vibrante, inquieto, y no solo en la pista, acertaron de pleno. Primer fin de semana, primera bomba.

Aún no se ha celebrado la primera carrera y el ‘paddock’ ya está nervioso, activo, pensando más en qué harán los cuatro ‘magníficos’ (Valentino Rossi, Jorge Lorenzo, Marc Márquez y Dani Pedrosa), cuyos contratos concluyen este año, que en quién ganará carreras. De momento, acaba de resolverse la primera incógnita: Yamaha prefiere retener a Rossi antes que renovar a Lorenzo. Yamaha prefiere al veterano de 37 años que al muchacho que, el pasado año, se proclamo brillante tricampeón del mundo, con 28 años, y la misma moto que el mito.

LORENZO PIENSA EN DUCATI

Es evidente que la postura del manager general de Movistar-Yamaha, el británico Lin Jarvis, puede forzar los cambios de planes de Lorenzo, que tiene sobre la mesa una oferta de locura, millonaria, para cambiar de aires e irse a Ducati. El desprecio que le acaba de demostrar Jarvis y Yamaha (se supone que no Movistar, claro) al joven tricampeón mallorquín es tremendo, ofensivo, hiriente. Lorenzo había pedido, hace solo unas semanas, lo mismo que Rossi: renovar por dos años antes de que arrancase el campeonato. Y, a 24 horas de que se apague el primer semáforo en el trazado nocturno de Doha, Yamaha le concede la petición a Rossi y se la niega a Lorenzo.

Es evidente que Lorenzo ha empezado a pensar en abandonar Movistar-Yamaha ya mismo y, sobre todo, en seguir demostrando que es más veloz que Rossi, como ya ocurrió el pasado año. Hay quien dice que Yamaha tiene ya atado al sustituto del mallorquín y que, probablemente, ya ha llegado a un acuerdo con el catalán Maverick Viñales (Suzuki), la auténtica revelación de la pretemporada y el joven con mayor futuro del ‘paddock’.

VIÑALES, SUSTITUTO DE LORENZO

Viñales, de solo 21 años y el único joven que le complicó, a veces, la vida a Márquez de niños, también queda libre y podría formar un tándem perfecto con Rossi en el 2017. La sensación de que Viñales acabará fichando por Yamaha fue confirmada por el mismísimo Rossi que, el pasado jueves, piropeó enormemente a Maverick al señalarlo “como uno de los jóvenes que hará historia en MotoGP”. El ‘Doctor’ elogió a Viñales “después de haber dado un par de vueltas detrás de él y comprobar su enorme calidad y destreza”. Blanco y en botella.

DUCATI A LA ESPERA

Lorenzo, que, el pasado miércoles, lamentó que Yamaha no hubiese accedido a renovarle antes de que empezase el Mundial (“bueno, mejor, así tendré tiempo para reflexionar sobre lo que hago y mi decisión de cara al futuro”), sabe que la Ducati ‘Desmosedici’, ayer la más veloz en Losail (coronó la recta a 350 kms/h.) y líder en tiempo con el italiano Andrea Iannone, parece lista para ser pilotada por un campeón. Es más, ya hay quien pinta en el equipo propiedad, no lo olvidemos, de la poderosa firma Audi y patrocinado por el no menos poderoso imperio Phillip Morris (Marlboro), que la pareja del futuro rojo será la formada por Lorenzo y el australiano Casey Stoner, de 30 años, ahora piloto probador de la marca de Borgo Panigale.

Veremos cuál es la reacción de Lorenzo, pero el gesto de Yamaha es una auténtica ofensa a su campeón, a su tricampeón, que no es otro, en estos momentos, que el piloto mallorquín.