Editorial

La pujante investigación espacial europea

El aterrizaje del módulo 'Philae' en el cometa 67P constituye uno de los grandes logros en la historia de la ESA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Durante décadas la carrera espacial se planteó como uno de los frentes más relevantes de la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Si el universo era escenario de una batalla tan científica como política, hoy predomina el primer aspecto aunque nunca dejará de lado la vertiente propagandística, como demuestra la irrupción del gigante chino en el espacio. Pero una organización como la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), constituida en 1975, apostó por una plausible entente entre países (con 20 estados miembros) para la investigación. La ESA, que no depende de la UE aunque sí mantienen vínculos, desarrolla numerosos proyectos, por ejemplo los cohetes Ariane y el Meteosat de información meteorológica, y es puntera en satélites comerciales.

El histórico aterrizaje del módulo Philaeun laboratorio robótico de 100 kilos de peso, en el cometa 67P constituye uno de los grandes logros en la historia de la ESA. El proyecto, con participación española, se ha desarrollado a lo largo de una década y ha culminado conforme a lo previsto. Ni el aterrizaje accidentado ensombrece el éxito, porque la información que han proporcionado el módulo y la nave Rossettaa la que estaba adosado, es superior al conocimiento previo que se tenía sobre cometas. Las imágenes captadas serán más pobres de lo esperado, pero no así otro tipos de datos como los geológicos del 67P. Europa, por lo tanto, también mira muy alto en la investigación espacial.