Dos miradas

KRLS y el trigo

Como sabe todo el mundo, las metáforas las carga el diablo, y más aún si son de índole agrícola

Carles Puigdemont.

Carles Puigdemont.

Josep Maria Fonalleras

Josep Maria Fonalleras

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Como sabe todo el mundo, las metáforas las carga el diablo, y más aún si son de índole agrícola. La naturaleza genera una gran cantidad de pretextos para extrapolar las virtudes de la tierra y la abundancia de la cosecha, el desencanto de la hoja muerta o los pámpanos humildes de la viña, a la vida en general, sobre todo la que no es rural. Los encontraríamos a miles, para cargar un carro lleno de gavillas de espigas de trigo.

Hablando de trigo, el 'president' Puigdemont vio trigo el día de la República, también Viernes Santo, en un campo de Canapost, un pueblecito del Empordà. «He visto cómo crece el trigo», decía en su cuenta de Twitter @KRLS. «Que su verde de hoy no nos confunda: estará listo cuando llegue el tiempo de siega». También hay una foto, de su cosecha, nunca mejor dicho. Se ve una extensión ciertamente verde con una colina al fondo.

Tras una semana de pasión, de confrontaciones, grabaciones, puñaladas y enfrentamientos, no hay nada como la paz del Beatus Ille, aquel verso memorable de Horacio: «Venturoso quien, lejos del mundo, labra los campos del padre con sus bueyes». 

El problema es que KRLS, 'el president', no tiene campos ni bueyes y confunde el trigo con la cebada, como aclaró un payés del Lluçanès, Abel Peraire. «Es cebada, pero bueno, tú preocúpate del referéndum, que los payeses ya nos cuidaremos de alimentar el nuevo país». A mí, lo que me preocupa es que sea el único que dice ver crecer el trigo (o la cebada). Para el caso da igual.