AL CONTRATAQUE

Vivir en funciones

El presente es precariedad laboral y el 'clan Pujol'. Por eso a ellos solo les importa el futuro

Rajoy, en la clausura del congreso de Nuevas Generaciones.

Rajoy, en la clausura del congreso de Nuevas Generaciones.

JORDI ÉVOLE

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El Gobierno de España y el Gobierno catalán están en funciones. O sea, dos gobiernos provisionales a la espera de los definitivos. Y, mientras, nuestra vida también está en funciones, a la espera de lo que pueda pasar. Es como si el futuro se hubiera adueñado del presente, pero no por casualidad. El presente es, entre otras cosas, precariedad laboral y la economía de los Pujol. Pujol.Tengo la sensación de que algunos no quieren que reparemos demasiado en todo eso. Para ellos, solo importa el futuro. Para unos, el futuro es ganar las elecciones. Para otros, el futuro es la independencia.

El PP de la precariedad laboral lidera las encuestas. Yo, si fuera un partido de la oposición, antes de criticar al PP me criticaría a mí mismo por haber sido incapaz, hasta ahora, de ofrecer una alternativa convincente.

Gane quien gane el 20-D, lo más probable es que durante la noche electoral el vencedor aparezca en un balcón y suelte: "Pienso gobernar para todos, me hayan votado o no". Un ruego: ¿sería posible que no empezaran a mentir desde la primera noche? Es imposible gobernar a favor de la ley mordaza y contra la ley mordaza, es imposible gobernar a favor de la reforma de la Constitución y contra esa reforma, es imposible gobernar a favor de un referéndum en Catalunya y contra el referéndum. Nadie puede gobernar a gusto de todos, pero da gusto que un gobierno dialogue con todas las partes.

Por ejemplo, si el PP gana el 20 de diciembre, a no ser que cambie de opinión no habrá en Catalunya un referéndum a la escocesa. Es decir, vinculante y de común acuerdo con el Gobierno del Estado. Y no lo habrá porque es imposible que haya acuerdo si no hay diálogo. Y, en segundo lugar, porque el PP insiste en que no quiere que España se rompa.

Yo tampoco quiero que se rompa, pero querer no es poder, salvo para aquellos que creen que poder es imponer. Y eso vale igual para los que, sin diálogo, pretenden imponer la unidad como para los que, con el 48% de votos favorables, pretenden imponer la independencia.

Vivir juntos no significa vivir a gusto. Pero si de lo que se trata es de vivir juntos pese a quien pese, entonces el PP va bien encaminado. Es posible que eso le dé votos, pero no conseguirá evitar la fractura. Además de la precariedad laboral, habrá logrado la precariedad matrimonial. Seremos un matrimonio roto que sigue viviendo en pareja. Ideal para guardar las apariencias, nada más. Otra mentira, como la del balcón en la noche electoral. Tan increíble como declarar la independencia de Catalunya sin ni siquiera obtener en las urnas el apoyo de la mitad de votantes. Pero si de lo que se trata es de separarse de España y, a la vez, de la mayoría de catalanes, entonces los independentistas van bien encaminados. Aunque, para mí, es otro fraude, como los Pujol.Pujol.