Nuevos espacios para Sant Jordi en BCN

Antes de que el éxito pueda ser contraproducente, el Ayuntamiento de Barcelona -con su alcalde Xavier Trias a la cabeza- ha buscado una salida que parece razonable al colapso que provoca la fiesta del libro y de la rosa en la Rambla de Catalunya, una arteria de la capital catalana por la que pasear el día de Sant Jordi puede resultar muy fatigante, sobre todo para las familias, aunque se cierre el tráfico en sus calzadas laterales. Trias ha planteado a editores y libreros una alternativa posible en dos de las grandes vías que ha reformado en la recta final de su mandato: la Diagonal y el paseo de Sant Joan. Ya las aglomeraciones en las Ramblas, desplazaron las paradas unas calles más arriba, a la Rambla de Catalunya y al Paseo de Gràcia. En esta avenida, por su mayor amplitud, el problema resulta menos inquietante.

Mantener una línea de estands, en lugar de los dos habituales junto a las numerosas terrazas de bares y restaurantes, y prolongar los puntos de venta y firmas hacia la Diagonal serviría en efecto para una descongestión de la masiva manifestación cívica que define Sant Jordi. El paseo de Sant Joan, lógicamente, se quiere potenciar y ya ha mostrado este año un buen número de paradas que, sin duda, aumentarán en próximos años. Ya están muy asentadas, además, en su parte cercana al Arc de Triomf con el llamado 'triángulo friki', de librerías y tiendas especializadas en cómic y ciencia ficción. Descentralizar, en definitiva, siempre resulta positivo.