Nacho ha mutado a gancho

De su paso por La isla de los mosquitos (Supervivientes, T-5), Nacho Vidal se ha traído un efecto colateral preocupante. Se lo acaba de contar a María Patiño en el Deluxe. Después de explicar las secuelas físicas que este reality provoca en los concursantes, Nacho le ha confesado a María: «Mi pene ha cambiado totalmente. Es como tener el pene de otra persona. ¡Ahora tiene forma de gancho! ¡Y además mide menos! Al no haber tenido erecciones durante 97 días, algo se debe de haber atrofiado». Hombre, la verdad es que Nacho lo contó con notable fair play. Con gran desenvoltura. No dio la sensación de estar traumatizado. Pero dado que Nacho se gana la vida, y es famoso en todo el planeta, gracias a las colosales dimensiones de su miembro y a la prodigiosa forma en que lo mueve, el caso podría adquirir tintes dramáticos. La transformación de su herramienta de trabajo, que ha quedado con una extraña forma de garfio, puede condicionar su vida laboral. Es un asunto meditable. Demuestra este caso que en estos experimentos con seres humanos que Tele 5 realiza continuamente, como la ratomaquia Gran Hermano, o Supervivientes, los efectos secundarios pueden llegar a ser espeluznantes. De toda la cabaña de ratoncitos que a lo largo de 15 años han sido sometidos a la jaula de Merceditas, pongamos 200 o 250 criaturas, la mayoría han acabado enzarzados en sangrientas batallas, denunciándose entre sí en los tribunales, y muchos han requerido tratamiento psiquiátrico. El verano del 2013, la escritora y premio Planeta Lucía Etxebarria, que había entrado alegremente en el reality Campamento de verano, tuvo que abandonarlo a toda prisa porque su salud mental peligraba. Y ahora, al gran Nacho resulta que le ha quedado el pene en forma de gancho. Hombre, en vista de los efectos que los realities de T-5 producen, quizá el Ministerio de Sanidad debería comenzar a preocuparse.

No le preguntó María Patiño a Nacho absolutamente nada de ese turbio asunto en el que estuvo involucrado, quizá injustamente: esa acción policial en torno al caso Gao Ping llamada operación Emperador. La entrevista fue exclusivamente sobre sus andanzas por los cayos caribeños. Una cosa quedó clara: en este reality, los mosquitos, el hambre y las penalidades, también transforman la libido. La dejan reducida a nada. La prueba es que el admirado y potente Nacho, estuvo 97 días seguidos sin desenvainarla.