INTANGIBLES

Un luxemburgués, un letón y una austríaca

Tres sentencias europeas alteran todo el mercado laboral español

JESÚS RIVASÉS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tres jueces europeos, un secretario general español y tres sentencias que pueden ser tan históricas como polémicas. Un luxemburgués, François Biltgen; un letón, Egils Levits; y una austríaca, Maria Bergen, son los jueces de la sala décima del Tribunal de Justicia Europeo, con sede en Luxemburgo, que firmaron el 14 de septiembre tres sentencias que, muy en resumen -a pesar de los elementos confusos que incluyen- fallan contra las distintas indemnizaciones que reciben los interinos frente a los fijos en España y también ponen en solfa la concatenación durante años de contratos temporales, en este caso en la sanidad. Los tres jueces estaban asistidos por otro magistrado europeo, que actuaba como secretario de la sala, Alfredo Calot Escobar quien, tras un paso por el consejo de Cámaras de Comercio de la comunidad autónoma de Valencia, ha hecho casi toda su carrera profesional en el tribunal luxemburgués.

Las sentencias del Tribunal Europeo, que deberán ser aplicadas por los respectivos tribunales españoles, tendrán su propia adaptación, pero sobre todo provocarán importantes efectos políticos que, cuando se desatasque el bloqueo político, modificarán la legislación laboral actual. No tanto la última reforma del PP, como normas tan históricas como el Estatuto de los Trabajadores, que es donde parece estar el origen de lo que cuestiona el Tribunal Europeo y que, a partir de ahora, políticos de distinto signo, empresarios y sindicatos intentarán esgrimir a favor de las posiciones que más les interesen. Las sentencias europeas arremeten contra varias administraciones públicas españolas, pero repercutirán en el sector privado, que teme sus efectos porque utiliza procedimientos muy similares, tanto en los casos de indemnización como en la recurso sucesivo a contratos temporales.

"Los jueces son seres humanos" ha escrito el asesor empresarial y experto en relaciones laborales Fabián Márquez, que también advierte sobre la inseguridad jurídica que pueden crear estas sentencias. Los tres jueces de la sala décima del Tribunal Europeo, con largas carreras públicas, puestos ministeriales incluidos, no viven en una burbuja, y tampoco el secretario general español. Todos saben que las cifras de paro en España son las que son y por sus manos han pasado numerosos asuntos que demuestran que el mercado de trabajo español en la Administración -y fuera de la administración- está prostituido. No está claro cuál ha sido el detonante que les ha llevado a emitir estar tres sentencias, pero el "factor humano" siempre influye, incluso al magistrado más independiente y equidistante. Tampoco nadie sabe hasta donde eran conscientes, pero han podido hacer historia en el mercado laboral español con unas sentencias, quizá confusas, pero que marcarán un antes y un después.