Los siete errores de Bankia

1. El Gobierno se equivocó al permitir que fueseRodrigo Ratoquien presentase su despido de Bankia como una dimisión «por responsabilidad». Y aún más al dejar pasar dos días desde su salida sin aclarar que estábamos ante la nacionalización de la cuarta entidad financiera del país.

2.El Gobierno volvió a fallar al no admitir desde el primer momento la dimensión del rescate de Bankia. En apenas una semana, la cifra se multiplicó por cuatro: de «entre 5.000 y 7.000 millones», que dijoLuis de Guindosel 21 de mayo, hasta los 23.500 millones que Bankia necesita hoy. Es malo siGuindosse equivocó. Es peor aún si lo sabía y mintió. Un agujero que crece a cada hora solo da un mensaje: los balances contables en España no son de fiar. Como en Grecia.

3.Fue otro error garrafal cargarse la reputación del Banco de España para salvar el poco prestigio que aRatole pudiese quedar. Era más cómodo culpar al árbitro que a los gestores del PP. En el camino, la coartada del Gobierno obligó después a aceptar dos auditorías extranjeras a la banca española. Lo vamos a lamentar.

4. Fue un desastre queMariano Rajoy saliese en rueda de prensa por primera vez en medio año para decir, a las tres semanas de la intervención de Bankia, que aún no se sabe de dónde saldrá el dinero para pagar. Y fue una burla añadir que este pufo «no tiene absolutamente nada que ver con la prima de riesgo». Será culpa de los pitos al himno nacional.

5. El Gobierno se volvió a equivocar al filtrar el plan para refinanciar Bankia con bonos del Tesoro sin pactarlo antes con sus mayores. AsíMerkelsiempre se va a negar.

6. Es otro gravísimo error negarse a una comisión de investigación. La quiebra de Bankia no es un fenómeno natural como el granizo. Hay responsables y hay que exigir responsabilidades por simple justicia y para evitar que vuelva a pasar.

7. Pero el peor error de todos es el clásicomarianismodeRajoy: pensar que basta con esperar para que los problemas se solucionen sin más.