Geometría variable

¿Limpiando Catalunya?

JOAN TAPIA

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Mientras los empresarios muestran mas inquietud por el 27-S (ayer lo hizo el siempre prudente Miquel Valls, presidente de la Cambra de Comerç), el PP ha sido el último en decidir su candidato. Retira a la muy conocida Alicia Sánchez- Camacho, que lo fue el 2010 y 2012, y apuesta por Xavier García Albiol que logró la alcaldía de Badalona, la tercera ciudad catalana, en el 2011 y que ahora la ha perdido pese a haber subido de voto y ser de largo la lista mas votada.

Albiol es la bestia negra del progresismo porque su discurso contra la inmigración le acerca mas al Frente Nacional de Marine Le Pen que a la derecha de Nicolas Sarkozy, pese a que este también jalea reticencias similares. Atacar a los rumanos y repetir machaconamente que «los de casa primero» enerva a demasiada gente. No solo a Iniciativa. Por eso no logró pactar con nadie que le aportara los cuatro concejales (sacó diez) necesarios para continuar en la alcaldía. Pero Albiol es batallador, polemista (sin manías), sabe llamar la atención y en Badalona ha sido un alcalde próximo. Ha satisfecho a sus electores, que no son marcianos (bastantes vienen del PSC) y la clase media del centro (tirando a catalanista) le reconoce buena gestión. Además, su talla de jugador de baloncesto y las críticas del mundo progre le darán mas notoriedad.

Albiol se ha hecho un hombre en Badalona. Pero eso no implica que sea un buen candidato a la Generalitat. Ni que el polémico Limpiando Badalona pueda convertirse en Limpiando CatalunyaRubalcaba ya ha dicho que «los problemas de Catalunya no se resuelven apelando a la xenofobia». Y nadie puede predicar «limpiar» al 44% de catalanes que se dicen soberanistas.

Albiol se agitará y atraerá focos de televisión (TVE la primera). Pero que el partido del Gobierno cambie de candidato en el último momento y en un territorio donde tiene un serio problema, es confesar que no ha hecho las cosas bien. Que ha perdido el rumbo.

Camacho, aunque al final ha confundido firmeza con chillido, no es la culpable de la caída de voto del PP que predecía el lunes la encuesta de la La Razón. Bajaba de 19 a 10 diputados.

La responsabilidad

El desplome del PP en Catalunya se debe a que el Gobierno de Rajoy no ha aprovechado la mayoría absoluta para acercarse al centro y a que no ha hecho tampoco ningún gesto para limar el conflicto originado por la famosa sentencia del Constitucional. Aquello es ya pasado pero la persistente inacción durante toda la legislatura es doloroso presente. Por eso otra encuesta -esta de El País- decía el domingo que nada menos que el 83% de los catalanes (y el 55% de los españoles) suspendía la política de Rajoy con Catalunya.

La culpable (al menos el principal) no es Camacho sino la ceguera total de Génova ante el profundo malestar catalán. El error de la presidenta del PPC (hasta ahora también ha sido su fuerza) ha sido plegarse a la voluntad de Madrid. Así se logran aplausos del ABC pero no se ganan voluntades en Catalunya.

¿Puede funcionar el parche Albiol? Es combativo. Y sabe plantar cara. Pero quitar argumentos al independentismo y acercarse al catalanismo moderado era Rajoy el que tenía que trabajarlo. No lo ha hecho, se le ha acabado el tiempo (al menos hasta el 27-S) y ha decidido lanzar a Albiol a la pelea. Ahora quizás no quiera tanto competir en el campo de la centralidad catalana -para eso debía haber usado al pactista Enric Millo- sino luchar por el voto no independentista para evitar un humillante sorpasso de Ciutadans que favorecería a Albert Rivera en las elecciones españolas. Y en eso quizás si que Albiol sea más alto que Inés Arrimadas.