Análisis

Jaque, pero no mate

Mas gana ahora tiempo. Aire para respirar. Y reparte presión.

TONI AIRA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Se puede hacer el ridículo de muchas maneras. Por ejemplo diciendo que en Catalunya existe una mayoría silenciosa contra el derecho de los catalanes a decidir libremente su futuro, y después no llenando la plaza de Catalunya el Día de la Hispanidad ni habiendo puesto autocares con gente llegada de otros puntos del Estado. Se puede caer en el ridículo de esta forma, y de hecho el PP, Ciutadans y los satélites asociativos que han montado en los últimos tiempos así lo mostraron hace cuatro días, con muy poca capacidad de convocatoria, o se puede hacer también con todas las encuestas a favor, con una mayoría amplísima del Parlament de Catalunya y con la Diagonal y la Gran Via de Barcelona llenas a rebosar de gente por la Diada. Si no se aparcan los cálculos electorales, también pasará.

Ante el desacuerdo entre las fuerzas políticas catalanistas a la hora de concretar qué consideraban como las "garantías democráticas" suficientes para hacer la consulta y si estas ya no se daban por el veto de Madrid vía recurso del Tribunal Constitucional, el presidente Artur Mas no tenía muchas más opciones que la anunciada ayer. La intransigencia de Mariano Rajoy, el peso de la maquinaria del Estado, movilizada como lo hace en bloque en pocas otras ocasiones, y la negativa de Oriol Junqueras a acordar una lista unitaria cara a unas elecciones plebiscitarias tenían al presidente en jaque, de momento aún no en jaque mate. Ahora gana tiempo. Aire para respirar. Y reparte presión.

 El Estado español tendrá que continuar soportando un frente catalán que no se rinde, con la posición inmóvil de Rajoy cada día menos comprensible a ojos del mundo. Entre los alucinados por esta manera de hacer, por cierto, unos cuantos en el PP mismo. Y en Catalunya, los partidos proconsulta, y muy especialmente ERC y CiU, tendrán que demostrar como nunca qué quieren, si ganar la libertad o seguir como siempre. Los había que se pensaban que todo se acababa el 9-N, pero no. Todos ahora han ganado más tiempo. Ahora tienen más margen, tampoco una eternidad, para mirar de evitar de hacer un gran ridículo.