Gaspar, el rey 'cuñao'

Siempre he sostenido (perdonen si me repito) que el primer trauma sufrido por todo español es descubrir que los Reyes Magos no existen y que los regalos se los han comprado sus padres. Es una mala manera de empezar en la vida, pues te genera una desconfianza brutal hacia los adultos en general y tus progenitores en particular: ¿cómo te vas a creer, a partir de entonces, lo que te cuenten tus padres? Algunos aún no lo hemos superado, pero nunca se nos había ocurrido pensar que el trauma pudiese ser aún peor. Lo han podido comprobar unos tiernos infantes de Carmona, Sevilla, cuando en una entrega de regalos organizada por las Hermanas de la Cruz, el rey Gaspar se despojó de la barba y la corona -parece que le daban calor, y él ya venía bastante calentito tras hacer un alto en algunos bares de la zona- e informó a la audiencia de que no era el rey Gaspar, sino Chiquetete, el cantante, el de la cobardía, añadió, refiriéndose a un 'hit' suyo de hace décadas (por si los niños, dada su corta su edad, no estaban familiarizados con esa obra maestra, el hombre cantó unas estrofas). Que los Reyes sean tus padres es una muestra de crueldad, pero que los Reyes -o uno de ellos- sean Chiquetete, ya entra en el terreno del recochineo. ¡Dios les conserve la vista a las monjitas!

La reacción en la red -donde Chiquetete, por cierto, suele colgar fotos suyas en la puerta de los bares que frecuenta, que son muchos y variados- ha sido apoteósica, y no es de extrañar que la charlotada del cantante se haya convertido en 'trending topic': échenle un vistazo al video y entenderán por qué. ¿Será una jugada de su manager para ver si a Chiquetete lo invitan a algún programa de televisión, aunque solo sea para discutir con su ex mujer, Raquel Bollo, que cuando no sabe de qué hablar recuerda sus años infernales con él?

 Convertido en cuñao del año, Chiquetete se ha llevado por delante las demás polémicas de las cabalgatas: que si las 'drag queens' de Vallecas, que si los lazos amarillos de Manresa, que si algunos Reyes Magos hablaban de presos políticos….Y ha puesto el listón muy alto: a ver quién supera eso. Solo se me ocurre disfrazar de Reyes Magos a las Campos, pintándole la cara de negro a cualquiera de las dos hermanas, la que tenga más papada que disimular.