¡Extra! ¡Han cesado a Pedro J.!

Citarse frente a un quiosco de prensa ha sido una magnífica idea. Les contaba el quiosquero a Pedro J. y a Jordi Évole (Salvados, La Sexta) que hace 10 años vendía cada domingo 150 ejemplares de El Mundo, y que ahora apenas vende 60. Este apunte, nítido, real, auténtico, sobre la tragedia que vivimos los que nos dedicamos a esto, quizá ayude a sensibilizar a la ciudadanía que el recurso de la lectura a través de internet es cómodo y hermoso, pero que debe haber el pago correspondiente de por medio. La entrevista con el recién cesado director de El Mundo ha dejado clara una cosa: ha sido arponeado por las altas instancias del poder, pero él sigue siendo un temible arponero. Por Rajoy siente desprecio. Por Felipe González, odio. Por Aznar, nostalgia de las partidas de pádel en la cancha que había junto a la primera sede de su periódico. Cuando Évole le preguntó por aquel famoso vídeo sexual con la espectacular Exuperancia Rapú, no dudó Pedro J. en señalar a los entornos de Felipe (Angel Patón y Rafael Vera) como los impulsores de la grabación: «Pagaron por hacer el vídeo 50 millones de pesetas. Creían que las tendencias sexuales de cada uno podían ser objeto de estigma social. Pensaban que me hundirían la vida. Pero España, en aquella época ya no era así». Sobre la autoría de los atentados de Atocha, parece que hoy Pedro J. ha abandonado su obsesión: sigue advirtiendo que no está claro quién cometió los atentados, pero ya no tiene la convicción de que fuera ETA. Y sobre las causas de su reciente cese como director, advirtió que la decisión ha sido empresarial, pero señaló las claras alusiones públicas de Rajoy en contra de las líneas de investigación de su diario, caso Bárcenas en concreto.

Ha sido en este tramo de la charla donde Pedro J. ha lanzado el arpón, a mi juicio, más interesante y más certero. Fue cuando señaló: «El problema no es que el poder sea fuerte. El problema es que la prensa es débil. La inversión publicitaria en prensa diaria en el año 2007 eran 2.000 millones de euros. Hoy no llegan a 700. Si eliminamos de la prensa española las redacciones de El País, de El Mundo, de ABC, de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA y de La Vanguardia ¿quien cubrirá la actualidad y hará investigación? El Gobierno de Rajoy quiere que haya los menos periódicos posibles. Y que sean lo más dóciles posibles». ¡Ah! Nítido arpón. En efecto, desean  ruido de propaganda. Todo lo demás, silencio.