POLÉMICAS PALABRAS DEL MINISTRO DE EDUCACIÓN

Estalinismo de derechas

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, en el Congreso.

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, en el Congreso. / JLR

Enric Hernàndez

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Loszares de la Rusia Imperial siempre acariciaron el sueño deeliminar cultural, lingüística y étnicamente a lasminorías eslavas y bálticas de los territorios conquistados. En los primeros tiempos de larevolución bolchevique, la flamanteUnión Soviética exploró la vía del apaciguamiento("indigenización", le llamaron) con los territorios no rusófonos, pero con el ascenso deStalin al poder, y en particular tras la segunda guerra mundial, la rusificación a sangre y fuego se impuso en el bloque del Este.

El encarnizamiento delestalinismo con las minorías y su desprecio por la diversidad tuvieron su correlato enEspaña bajo el yugofranquista. Felizmente, la caída del Muro de Berlín y la extinción orgánica de la dictadura española desterraron del Viejo Continente aquellas pulsiones expansionistas que engendraban prácticas genocidas. Pero quien tuvo, retuvo.

"Españolizar a los alumnos catalanes", "Españolizar a los alumnos catalanes",propósito gubernamental confesado ayer en el Congreso por José Ignacio Wert,es el equivalente contemporáneo (y de derechas) de la rusificación estalinista. Quizá el muy liberal titular de Educación no haya reparado en ello, pero nada hay másintervencionista que servirse del 'Boletín Oficial del Estado' (BOE) para manipular las mentes y lalengua de niños y adolescentes. Sorprendente conducta, en todo caso, viniendo del ministro que suprimió la asignatura deEducación para la Ciudadanía con el argumento de que era un vehículo de adoctrinamiento.

Parte Wert del prejuicio, común en los ambientes madrileños y en las tertulias radiofónicas que antaño frecuentaba, de que laGeneralitat lleva tres décadas abusando de las competencias educativas paraadoctrinar a los alumnos en elindependentismo y erradicar elcastellano de Catalunya. Una hipótesis que, por lo demás, no corroboran ni las urnas ni la vitalidad del castellano en la sociedad catalana.

Pero las palabras de Wert también delatan su verdadero pensamiento: igual que se privatiza una empresa pública o se nacionaliza un banco privado, si el Gobierno se propone "españolizar a los alumnos catalanes" es porque no los cataloga como españoles. En eso, paradójicamente, coincide con el independentismo catalán, el mismo al que no se cansa de regalarmunición argumental.