mi hermosa lavandería

Enfermos muy imaginarios

dominical 661 seccion coixet

dominical 661 seccion coixet / periodico

ISABEL COIXET

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Recibo, como imagino que muchos de ustedes cada día, un correo con un llamamiento para recoger dinero para un niño con espina bífida. Es un correo con una extraña sintaxis, como si hubiera sido traducido con el traductor instantáneo de Google de algún idioma eslavo, aunque el niño enfermo, según las informaciones dadas, reside en España “y tiene que recibir urgente tratamiento en Houston”. Cada día se producen miles de peticiones como esta. Algunas son absolutamente fehacientes y responden a un grave problema concreto; otras son un timo: el niño no existe y se trata de un timador profesional que quiere sacar dinero a los incautos que, como yo, se detienen a leer correos como ese.

Pero hay algo muchísimo peor que una estafa en nombre de un niño imaginario. Me refiero a las historias de blogueros reales, con nombres y apellidos,  que fabrican cánceres, leucemias, esclerosis múltiples y otras mil enfermedades para despertar la simpatía de los demás, llegando incluso a fingir su propia muerte. El caso más extremo es el de la bloguera australiana Belle Gibson (foto). Su historia es una alucinante amalgama de falsedades que consiguió centenares de miles de seguidores en todo el mundo, conmovidos por la sinceridad con la que esta chica de 20 años, con un niño de 4, relató sus últimos supuestos cuatro meses de vida, aquejada de un tumor cerebral inoperable. Durante esos meses, la australiana narró en su videoblog, en primera persona, el día a día de sus sesiones de quimioterapia y radioterapia, llegando incluso a afeitarse las cejas y la cabeza. Tambien habló del poco tiempo que le quedaba con su hijo, al que no iba a ver crecer. Y cómo pasaba sus días abrazándole, pensando que cada abrazo podía ser el último. A partir del segundo mes, empezó a explicar su conversión a una dieta sin gluten ni lácteos y a terapias alternativas diversas que la salvaron milagrosamente de la muerte. Belle Gibson lanzó entonces su propia aplicación,  The Whole Pantry, donde daba recetas saludables previo pago de tres dólares. Llegó a conseguir 300.000 dólares que prometió donar a caridades diversas. Fue nombrada Mujer del Año por la revista 'Elle' y recibió otro premio de la revista 'Cosmopolitan' como una de las mujeres más inspiradoras del año. La prestigiosa editorial Penguin publicó un libro de recetas escrito por ella, con consejos sobre terapias alternativas para curar el cáncer. Y Apple la invitó al lanzamiento del reloj Apple Watch en Silicon Valley. Y entonces el cáncer reapareció otra vez con más fuerza. Y, entre lágrimas, Belle explicó en su blog que esta vez no había salvación posible, pues el cáncer se había extendido a su hígado.

Pues bien, todo era mentira. Hace unos días, ella misma admitió: “Nada de lo que he contado sobre mis enfermedades es cierto”. Por no tener, ni siquiera tiene un hijo. Ahora está siendo investigada por las ganancias obtenidas a partir de la aplicación que creó sobre un nido de falsedades.

Pero hay más Belle Gibson en el mundo, afectadas por el síndrome de Münchaussen, que tiene en internet un caldo de cultivo más que perfecto. Yo he sido una de esas personas que se conmovió con el blog de la australiana, creyéndolo rigurosamente auténtico. Me consuelo pensando que al menos no piqué con los tres dólares de la aplicación ni con el libro. Y me puedo imaginar muy bien la cara que se les ha quedado a los que lo hicieron.