El canto del cisne

La del canto del cisne es una expresión que se puede utilizar para designar la última gran obra o actuación de una persona. En el PSOE los hay que utilizaron esta imagen después de seguir la intervención de Alfredo Pérez Rubalcaba ante Mariano Rajoy en el debate de política general en el Congreso. Uno y otro lo habían trabajado a fondo, en clave de apertura de la campaña de las elecciones europeas de mayo, Rajoy muy especialmente con la ayuda de su director de gabinete, Jorge Moragas. Y Rubalcaba muy especialmente también con su jefe de gabinete, Manolo López, pieza clave en la sala de máquinas del PSOE actual, en la sombra.

En su despacho de la Moncloa, Moragas tiene la figurita de un submarino que él señala cuando reúne allí a su equipo, para poner en valor la discreción que reclama su trabajo. Desde ese lugar ha coordinado la mayor parte de los muchos esfuerzos que los equipos de comunicación de los ministerios, vicepresidencia, la Secretaría de Estado de Comunicación y el Gabinete de Presidencia han dedicado a tejer un relato en la línea del eslogan de la reciente convención del PP: En la buena dirección. Todo al servicio del liderazgo y de la actuación de un Rajoy que podría haber asistido al Mobile World Congress y a la inauguración de las reformas en el Hospital de Sant Pau, pero que dedicó el fin de semana y buena parte del lunes a rematar el trabajo de su discurso. Un trabajo coral, en (amplio) equipo.

Rubalcaba también lo hizo con el apoyo destacado de íntimos como Ramón Jáuregui, Elena Valenciano y José Enrique Serrano (quien fuera jefe de Gabinete en la Moncloa con Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero). Pero a quien señala principalmente su entorno como la mano destacada a la hora de tejer el discurso del líder socialista es a Manolo López, jefe de gabinete suyo desde que Gregorio Goyo Martínez abandonó este cargo en enero pasado para asumir la gerencia del partido.

López, culto, discreto, buen polemista y vinculado a la maquinaria del partido de hace años, fue pieza clave en un discurso de Rubalcaba «que gustó a los suyos, cosa extraña hace sólo seis meses», según un destacado dirigente del PSOE crítico con el actual secretario general, y que añade: «¡Si es que hizo un gran discurso! Como el cisne que antes de morir entona su mejor canto». Buena música, en todo caso, con letra complicada que explica que Rubalcaba no remonte en las encuestas. Porque más allá del aborto, ¿qué otra política claramente alternativa y creíble ofrece el PSOE hoy? Porque puedes ser un gran comunicador, tener un gran equipo que te ayude a hilvanar un gran discurso, ¿pero qué comunicas? Al final, esa es la clave.