El 27-S, en manos de la gente mayor

El Gobierno del PP laminó las competencias de los ayuntamientos para controlar el presupuesto y convertirlos en meras gestorías. En dos semanas, algunos de los nuevos ayuntamientos en manos de la izquierda ya han lanzado mensajes contundentes: hay margen para la política. La nueva política en los consistorios ha venido acompañada de decisiones con mucha intención. Madrid, Valencia, Barcelona y ciudades como Badalona y Sabadell van en esta dirección, mientras los partidos hegemónicos de la vieja política se aferran a pactos 'sociovergentes' que no conectan con la ola de cambio.

Los últimos 15 días han coincidido con el desconcierto soberanista por el debate reabierto por el 'president' Mas. El gesto de Oriol Junqueras ha descolocado a CDC y ha planteado un debate relevante. Mientras Podemos e ICV articulan una lista ciudadana con un candidato de prestigio que no encuentran, los independentistas podrían superar la polémica de las listas y parar los pies demoscópicos a Pablo Iglesias con una propuesta transversal de la sociedad civil sin políticos. La CUP no está por la labor, Mas no ha abierto boca pensando su nueva jugada, y ANC y Òmnium han superado el chantaje del 'president' con una decisión salomónica que satisface a ERC.

El último sondeo del Govern indica que los independentistas no han tomado nota del referéndum escocés. Los mayores de 65 años son los más reacios a la independencia (34%), de tal manera que el escaso margen para una victoria o derrota del 'sí' catalán depende de los abuelos. Sus nietos (18 a 24 años) son los más independentistas (56%), y la clave del 27-S pasa, en parte, por la pugna por la ilusión entre las listas de Mas y Junqueras ante Podemos e ICV, y por la movilización del electorado mayor.