PEQUEÑO OBSERVATORIO

La doble explosión de una escritora

La expresión de Paula Hawkins, con su aire serio y natural, tiene algo de pintura clásica

Paula Hawkins, en una imagen facilitada por la editorial, ya que la autora no quiso ser retratada durante su visita a Madrid para promocionar 'Escrito en el agua'.

Paula Hawkins, en una imagen facilitada por la editorial, ya que la autora no quiso ser retratada durante su visita a Madrid para promocionar 'Escrito en el agua'. / periodico

JOSEP MARIA ESPINÀS

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El mundo de la narrativa literaria de autoras femeninas se ha agrandado en el transcurso de los años. Si miramos atrás, siempre encontraremos algunas narradoras que han tenido éxito, pero en general no han sido espectaculares. Ahora hay escritoras que se han incorporado al mundo de los best-sellers con una poderosa fuerza. Sin apuntalarse en el feminismo, sino en la exploración de la condición humana.

Es el caso de Paula Hawkins, que ha sido entrevistada extensamente en este diario por Olga Pereda. Vender 20 millones de libros en todo el mundo es un hecho realmente extraordinario. No se puede llegar a esta cifra si no se produce un contagio de lectores, si no hay un fenómeno de aceptación general. Primero el éxito de 'La chica del tren', y luego otro fenómeno de ventas: 'Escrito en el agua'. Un 'thriller' psicológico. Pero yo pienso que no es el género literario lo que sería la base del éxito, sino la manera de escribir una historia.

Un día me gustaría reflexionar sobre la importancia de 'las maneras'. Todos hemos creído, alguna vez, que los hechos son importantes, y es cierto, pero no somos conscientes, a menudo, que la presentación de un hecho influye decisivamente en la comprensión de un objetivo. La forma es importante en la formulación de una propuesta. Hay un abrazo que es estrictamente convencional y un abrazo que transmite sentimientos o sensaciones.

Antiguamente, en Europa, si se quería saber si una mujer era una bruja la metían en el agua para comprobar si se hundía o si flotaba. Las mujeres tenían que estar controladas por la sociedad.

Dice Paula Hawkins: «No es que deteste las entrevistas, pero no es la parte del trabajo que me hace disfrutar más». Miro su foto en los periódicos –la única para la prensa– y se presenta con un aire serio, natural, sin una expresividad vendedora. Tiene algo de retrato de pintura clásica. Éxito más allá de la moda.