LA RUEDA

El dilema de Mas y Junqueras

SAÜL GORDILLO

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

De la ruptura de agosto a la reconciliación de septiembre, pasando por la aprobación de la ley de consultas y un debate parlamentario de gran tensión entre Artur Mas y Oriol Junqueras. El president convocó el sábado la consulta del 9-N como se había comprometido en campaña electoral y acabó pactando con ERC, ICV-EUiA y CUP. El líder de Esquerra ha jugado a tensar y destensar la cuerda para conseguir que Mas y su entorno no mataran la consulta antes de tiempo, evitando la frustración de los casi dos millones de manifestantes de la Diada y del conjunto de ciudadanos que quiere votar el futuro de su país.

Este lunes moverá ficha Mariano Rajoy y todo el aparato del Estado, pero difícilmente pasaremos la pantalla de la consulta tan fácilmente. Fíjense en el tsunami de casi 900 ayuntamientos de todos los colores favorables a la consulta. A la espera del desenlace del 9-N, Mas y Junqueras han evitado defraudar a una parte mayoritaria de los catalanes a pesar del boicot del Estado. Ahora les toca pensar en las siguientes pantallas, y una de ellas son las elecciones «plebiscitarias».

Rajoy desea que Mas y Junqueras vayan separados a las urnas, que gane el republicano sin mayoría absoluta y que un cisma en CiU con el president convertido en el Ibarretxe catalán provoque el descarrilamiento del proceso. La caverna ya se frota las manos, pero la capacidad de sorprender de Mas Junqueras está fuera de dudas. Algunas encuestas indican que, por separado, ERC y CiU sumarían más diputados que en una misma candidatura. Pero, ¿aceptaría Mas una lista con Junqueras e independientes y el compromiso firme de una declaración unilateral de independencia? Si Mas y Junqueras dejan las siglas partido al margen, no descarten nuevas sorpresas.