Democracia o corrupción

Declaración de Bárcenas en la Audiencia

Declaración de Bárcenas en la Audiencia / df/ql

Joan Coscubiela

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Nunca antes un conflicto social y político se había presentado con tanta nitidez. O la ciudadanía y las instituciones rescatamos lademocraciao la corrupción en todas sus facetas, que son muchas, habrá triunfado. Es cierto que el 'caso Bárcenas', Rajoy y PP no es el único problema que tiene el país. Es cierto que existen muchas y poderosas razones para exigir que Rajoy dimita y se convoquen elecciones. La primera de todas, el drama social que ha provocado con sus políticas y sobre todo con sus mentiras, haciendo desde laMoncloa lo contrario de lo que dijo y mintiendo reiteradamente, también después de ser elegido presidente del Gobierno.

Ni un minuto más

En mi caso también resulta trascendente que se niegue a reconocer elderecho democrático a decidir que exige la ciudadanía deCatalunya. Pero todas estas razones, tiene hoy un hilo conductor, la defensa de la democracia, frente a quienes quieren la impunidad de la corrupción que, de por sí es la misma negación de la democracia. Reitero lo que he repetido en el Congreso en muchas oportunidades. Unpresidente del Gobierno, que ha venido cobrando y tolerando que otros cobren sobresueldos, no puede exigir sacrificios a la ciudadanía y especialmente a los sectores más necesitados. Un presidente del Gobierno que ha comprado el silencio de un evasor fiscal y corrupto hasta enero del 2013 y le ha dado cobijo en el PP no tiene credibilidad para desentenderse de todo lo que este delincuente ha hecho. Pero sobre todo, Rajoy no tiene autoridad para representar ni un minuto más a su país.

Mentiras

Hoy, una vez más, Rajoy nos ha mentido y engañado de manera tan zafia como insultante. Son tantas las veces que nos ha mentido que la ciudadanía corre el riesgo de normalizar esta actitud. Hoy en España, además de los derechos conseguidos durante décadas, está en juego la propia democracia. Democracia es sobre todo la existencia de contrapoderes que impiden que ningún poder, de ningún tipo, se imponga sobre el conjunto de la sociedad. Durante esta legislatura la democracia se ha debilitado hasta resultar irreconocible. No se trata solo de la manera absolutista con que el PP ha ejercido su mayoría absoluta en el legislativo, se trata del abuso reiterado de los Decretos Leyes, del control antidemocrático del Poder Judicial, de la criminalización y persecución de los movimientos sociales.

Ahora, Rajoynos confirma que, en su obsesión por aguantar a toda costa, está dispuesto a impedir que funcionen los mecanismos de control democrático de las instituciones. Su negativa a comparecer ante el Parlamento, para que este cumpla una de sus funciones más determinantes, la del control del poder Ejecutivo, ha puesto de manifiesto que lo más importante hoy es rescatar a la democracia del secuestro a la que elPPla tiene sometida. La ciudadanía ha comenzado a movilizarse y espero que lo haga más en los próximos días. Y las fuerzas políticas tenemos la obligación de forzar la comparecencia de Rajoy.

Dimisión

Para conseguir este objetivo solo hay un camino, unir fuerzas en lo que nos une, la defensa de la democracia. Y eso pasa por la dimisión de Rajoy y por devolverle la soberanía a la ciudadanía, a través de la convocatoria de elecciones. Y si eso es lo que nos une, ningún grupo debería poner condiciones o requisitos que dificultaran la defensa común de la democracia. Situar ahora objetivos legítimos, pero que impiden alcanzar un acuerdo de defensa de la democracia, es hacerle el juego a Rajoy y sobre todo permitir que la corrupción le gane la batalla a la democracia.

No debería terminarse el Pleno del Congreso de esta semana sin que todos los grupos de la Cámara hayamos alcanzado un acuerdo para forzar la comparecencia de Rajoy y allí exponer un programa de mínimos. Ladimisión de Rajoy y la recuperación de la democracia, devolviendo la palabra a la ciudadanía.

Sería deseable que nadie eluda sus responsabilidades, que nadie busque coartadas para permitir que lacorrupciónle gane la partida a la democracia.