El CTESC prepara su relevo

De exconseller a exconseller y tiro por que me toca. Puede parecer una frivolidad pero es un hecho. El exresponsable de la Conselleria de Treball en el primer Govern de Pasqual Maragall, Josep Maria Rañé, acabará su mandato al frente del Consell de Treball Econòmic y Social de Catalunya (CTESC) y será relevado por Lluís Franco, también exconseller de Treball en uno de los muchos Governs de Jordi Pujol, y hasta hace pocos días director de la Agència Tributària de Catalunya (ATC). El primero lleva en el cargo seis años. Ha sido el presidente de este órgano consultivo del Govern que habrá durado más tiempo en el cargo.

Franco estaba en la Agència desde el 2011 y dejó el puesto el pasado 1 de abril. Le sustituyó Teresa Ribas, hasta entonces delegada territorial en Barcelona de este organismo, y de un perfil más técnico. El cambio coincide con el momento en el que el Govern quiere dar un fuerte impulso a la Agència para convertirla en el aparato recaudador de la Generalitat, una de las estructures d'Estat básicas.

Franco, cargo destacado de Unió Democràtica de Catalunya y al que le tocó dirigir Treball en uno de los momentos más críticos de esta conselleria, explicó que dejaba la ATC para preparar su paso al CTESC. El presidente de este organismo lo elige el pleno del Consell, formado por 36 personas, representativas a tercios de los agentes sociales, las empresas y asociaciones del tercer sector y personalidades propuestas por el Govern. El Executiu propone el nombre y este debe ser ratificado por el menos 24 miembros del Consell. O sea que si Franco dice que va para allá es que ya tiene asegurado este apoyo mínimo.

El CTESC ha hecho públicos informes de todo tipo en los últimos años, alguno de ellos muy crítico con la propuesta legal enviada por el Govern. En la mayoría de los casos, según sus actuales responsables, se le ha hecho caso, poco o mucho, pero siempre alguna de sus críticas ha sido tenida en cuenta.

Excepto en dos temas en los últimos seis años. En la ley de educación del tripartito, propuesta por el exconseller de Educació Ernest Maragall, de la misma familia política que el presidente del CTESC, y en los decretos de reforma de la renta mínima de inserción que promovió el exconseller de Empresa i Ocupació en el primer Govern de Artur Mas, el independiente Francesc Xavier Mena. Maragall ni siquiera pasó al Consell el texto definitivo del proyecto, a pesar de la exigencia de los miembros del CTESC para poder emitir el preceptivo dictamen. Y Mena hizo caso omiso de todas las propuestas del dictamen, que había logrado un gran apoyo y que fue uno de los más críticos elaboradas hasta ese momento. Veremos qué pasa con el relevo.