Contrato a medida del pene

ferran Monegal

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Según figura en mis cuadernos, la guerra entre Belén Esteban y su representante, mánager, apoderado y amigo del alma Toño Sanchis -dijeron que le ha robado, presuntamente, un millón de euros-, Tele 5 comenzó a explotarla y a sacarle beneficio en noviembre del 2015. Les advertí entonces que la bancarrota de Belén era el mejor regalo que podían hacerle a Mediaset, y que esta guerra la iban a estar impulsando al menos durante seis meses. Me quedé corto. Los seis meses ya han pasado y siguen llenando el 'Sálvame' y el 'Deluxe' con el tema. La desgracia de Belén le proporciona a Tele 5 una gloriosa recaudación en audiencia y en espots publicitarios de anunciantes diversos. Y la cosa sigue viento en popa. Esta semana Belén ha vuelto a protagonizar el 'Deluxe'. Dos horas seguidas mostrando papeles para demostrar la avaricia económica que su exmánager le venía propinando desde el 2007, por lo menos. Hubo incluso una pasmosa novedad: enseñaron un documento en el que, de los derechos de imagen de Belén, el representante se llevaba el 85%, y la representada el 15%. ¡Ah! Si Groucho Marx estuviera entre nosotros haría con este material una filigrana portentosa. La señora Esteban tuvo momentos de gran arrebato escénico, como cuando miró fijamente a cámara y dirigiéndose a su presunto ladrón espetó: «No te quepa la menor duda que de esta voy a salir. ¡Por mis cojones!». Obtuvo una gran ovación. Pero quizá el momento más entretenido de la noche fue cuando Kiko Hernández, para resaltar la personalidad del depredador, relató que en cierta ocasión Toño entró en un mingitorio, un urinario público, y vio que a su lado estaba también evacuando un joven llamado Agustín. Le llamó la atención las dimensiones de su pene. Quedó muy impresionado. Y al concluir la evacuación le soltó: «¡Agustín, estas contratado! Necesito a mi lado gente con una polla bien gorda».

¡Ah! Es un tema laboralmente novedoso: la contratación según el tamaño del cacahuete. Fuera del mundo del cine porno, no se conocen casos en que la envergadura del pene sea factor determinante para encontrar empleo. En la Grecia clásica, los artistas solían esculpir falos pequeños. Las tres obras mas importantes del gran tallista Policleto, los hercúleos Doríforo, Diadumeno y Discóforo, presentan penes de magnitud prudente. Esta fijación de Toño por los grandes cacahuetes, también demuestra codicia braguetera.