Campuzano: Un FROB para el Tercer Sector

Lacrisis está golpeando con mucha dureza todo el tejido asociativo. Los retrasos en los pagos de las administraciones públicas, la reducción o la desaparición de lassubvenciones que implica la política de consolidación fiscal, la desaparición de las obras sociales de las cajas, o las dificultades para mantener socios ydonantes privados, ponen en riesgo la continuidad de muchas de lasentidades del Tercer Sector.Tercer SectorAlgunas ya están cerrando.

Las consecuencias son tremendas. A corto plazo, afecta a los programas que atienden a las personas con situación de mayorvulnerabilidad (personas con  discapacidad, jóvenes en riesgo deexclusión,inmigrantes sin papeles, ...). A medio plazo, debilita el capital social y las posibilidades de participación y asunción de responsabilidades por parte de los ciudadanos.

En este sentido, hace pocos días elGovern y laTaula d'Entitats del Tercer Sector acordaron un plan de apoyo. Fue una muy buena noticia y expresó claramente la idea de que, para el Govern, el Tercer Sector es un aliado estratégico.

Necesitamos también un esfuerzo demovilización de recursos desde el Estado. El Estado tiene todavía unas capacidades que hoy laGeneralitat no puede movilizar. Especialmente, en el acceso al crédito. Y se necesita con urgencia.

Si el Estado ha movilizado una cantidad ingente de recursos para rescatar alsector financiero, es justo que reclamemos un esfuerzo para garantizar el trabajo del Tercer Sector.

Pero el Tercer Sector sufreproblemas más estructurales y de fondo, algunos tienen que ver con la actual legislación del Estado; otras con las inercias y debilidades de las propiasentidades. Una hoja de ruta que apunte las líneas maestras para su modernización y actualización es imprescindible.

De ahí la iniciativa que este semana hemos tenido en el Pleno delCongreso con una interpelación a la ministra del ramo,Ana Mato,y la moción que discutiremos el próximo día 23.

Nota de prensa de CiU

Observatorio del Tercer Sector