Un cachete a tiempo

Un cachete a tiempo es la mejor manera de decirle a un niño que se deje maltratar por cualquiera que tenga más autoridad que él

TOMÀS NAVARRO

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Un cachete a tiempo a tiempo es lo mejor. Sí, sin duda alguna. ¡Cuántas cosas se hubieran evitado con un cachete a tiempo! Pues muchas, sin duda alguna de nuevo. Un cachete a tiempo es la mejor manera de decirle a un niño que se deje maltratar por cualquiera que tenga más autoridad que él. Este aprendizaje, grabado a fuego en el alma, le va a permitir que sea vulnerable a los caprichos de cualquier pareja, jefe o familiar maltratadordominante agresivo. ¿Sabes quien tendrá más autoridad que él? Cualquiera que se muestre más fuerte, más seguro o más agresivo, cosa que no será difícil ya que cuando pegamos a un niño también le estamos pegando a su autoestima.

Un cachete es el fracaso del dialogo, del debate y de la argumentación. Con cada coscorrón le estamos diciendo a nuestro hijo que no merece la pena aprender a relacionarse ni a comunicarse. No hables, no expongas tus ideas, no te comuniques... aprende a evitar los cachetes, a aguantarlos o a darlos más fuerte.

Un cachete a tiempo es la mejor manera de decirle a un niño que se deje maltratar por cualquiera que tenga más autoridad que él

Cada torta que recibe un niño se convierte en resentimiento, incomprensión, odio o rabia. Con cada torta se aleja más de ti y te ve como 'un loco descontrolado e irracional incapaz de controlar sus emociones' y eso que son adultos, piensan. Con el tiempo dejarán de pensarlo y empezarán a imitarte, no olvides que los padres son los modelos de referencia, por lo que buscarán a otros niños a los que maltratar. A veces el que pega tortas físicas también las pega psicológicas a su pareja; por lo que posiblemente el niño vea que también se puede maltratar a la madre o al padre si es el caso.

Con cada colleja le estamos enseñando que tiene que luchar por ser fuerte e insensible y que si no lo consigue será un fracasado que estará recibiendo cachetes toda la vida quien sí que ha sido capaz de conseguirlo. O pegas o te pegan. Puedes pegar a alguien ya que se lo merece. No pasa nada por darle una castaña a alguien, es por su bien. Todas estas estúpidas justificaciones y muchas más sirven para justificar lo injustificable, para convertir en lícito algo inaceptable, para dormir tranquilo libre de culpa.

Queridos lectores, un cachete no sirve para nada, absolutamente para nada. Con cada cachete que das estás fracasando como educador, como referente y como padre. Con cada cachete estás creando un potencial maltratador o maltratado, una potencial maltratadora o maltratada. La violencia de género se gesta en la familia, recibiendo cachetes físicos y psicológicos.

Cambiemos la frase 'un cachete a tiempo' por la de 'una conversación a tiempo'. Quizás aquí radique el problema. En que no sabemos dialogar, ni relacionarnos, ni tolerar, ni comprender, ni ponernos en el lugar del otro.