IDEAS

El misterio Palau i Fabre

Josep Palau i Fabre, en abril del 2005.

Josep Palau i Fabre, en abril del 2005. / periodico

XAVIER BRU DE SALA

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Circula la sospecha, ya no tan secreta, de que los poetas no son buenos por los motivos por los que creen que son buenos sino a pesar de sus errores de adscripción estética. Así, el mejor Verdaguer no es el de los formidables cataclismos de 'La Atlàntida' sino el que intuye, describe o lamenta, en sintonía con Baudelaire, su propia catástrofe interior. Ni merece la pena Maragall por la ceguera vacuna, las 'fagedes' o los impúdicos abrazos a las 'ginesteres' sino por la especialidad más alejada de su predicada palabra viva, eso es por la poesía de ideas que fijan actitudes, desde el 'Himne Ibèric' al 'Cant espiritual' pasando por 'El comte Arnau'.

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Podríamos proseguir por el anzuelo poético de Carner, de una superficialidad que contrasta con los parámetros, menos frívolos, que presidieron la revisión de su obra. O por el mejor Espriu, que no es el cabalístico-metafísico ni el satírico-popular sino el de las confesiones veladas sobre su drama. O por Brossa Ferrater, emperrados, el primero a la francesa y el segundo a la inglesa, en ocultarse el romanticismo ante los propios ojos, y ni que decir tiene los del lector, de manera que les habría avergonzado más que nada ser tenidos como a los líricos que eran. Ahora bien, ante el caso Palau i Fabre, este tipo de disquisiciones dejan paso a una incómoda perplejidad, que no ha abandonado a algunos de sus lectores primerizos, entre quienes me encuentro. 

No hay obra de Palau que no contenga unas cuantas piedras preciosas, pero parecen de una tal disparidad de naturaleza y de formas, y de una tan deslumbrante intensidad, que da la impresión de tratarse de un autor a quien a menudo le toca una lotería aunque juegue a otra. Si no fuera por estos extraordinarias y abundantes hallazgos, que casi nunca tienen gran cosa que ver con el propósito de la obra, el Any Palau i Fabre tendría un interés funcionarial. Pero lo tiene primordial, comisarios.