Pequeño observatorio

El arte no es amigo del molde

JOSEP MARIA ESPINÀS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El músico-cantante Ben Bridwell, líder de Band of Horses, quinteto de Seattle que ha actuado en Barcelona, dijo: «Nosotros no hacemos dos conciertos iguales. Así que no sé exactamente qué repertorio haremos». Se entiende muy bien que quería decir que no hacían siempre el mismo repertorio, que en cada concierto introducían canciones que no habían interpretado en otros.

Esta afirmación la podríamos considerar desde otro e interesante punto de vista. Con este «igual», el líder del grupo significa que siempre hacen cambios en la programación de sus conciertos.

Muy bien. Pero me permito decir que aunque construyeran su concierto con las mismas canciones, siempre las mismas, nunca harían dos conciertos iguales. Porque es muy importante lo que se toca, pero mucho más, incluso, cómo se toca. Y es seguro que este grupo no interpreta una pieza siempre de la misma manera.

La calidad artística no se manifiesta en el qué, sino en el cómo. Se puede repetir una pintura diez veces, o cien, exactamente igual. La copia, o si se quiere la perfecta repetición, no es arte, sino mecánica. El actor de teatro es un auténtico artista cuando, teniendo que repetir cada noche la misma escena, la misma frase, siempre introduce un matiz en la palabra, una ligera modificación del gesto.

Cuando Ben Bridwell dice «nunca hacemos dos conciertos iguales», puede considerar que tiene mérito modificar el programa, pero lo que artísticamente cuenta es explorar por instinto creativo algunas variantes, por pequeñas que sean, en un tema que han interpretado varias veces. Otra cosa es que el público se ponga a cantar la letra de una pieza intentando repetirla exactamente como la han aprendido escuchando un disco. La solidaridad y el entusiasmo no son, en principio, artísticos. Pero los que están en el escenario se deben poder permitir un pequeño margen de libertad. En arte, el pequeño desacierto es mucho menos grave que la rutina.