A la caza de tíos buenos leyendo

Hace dos años que se convirtieron en especímenes con hashtag: #hotdudesreading (tíos buenos leyendo). Sus robados están tan buscados como los de la hija de Belén Esteban sin pixelar. Guapos que practican en el metro la lectura en vez del despatarre.

Abrió la veda una cuenta de Instagram de Nueva York: @hotdudesreading. Tras las fotos hay un eslogan pro lectura: #ReadingIsSexy (leer es sexy). A la semana la nombraron «fenómeno». Ahora tiene casi un millón de seguidores, libro y calendario a lo bomberos. Son los responsables de que los #hotdudes se multipliquen en Instagram a la velocidad de una panda de Gremlins en el aquapark. Ya hay cuentas de tíos buenos con perros, <strong>gatos</strong>, <strong>caballos</strong>, <strong>moños</strong>, <strong>bebés</strong>, ¿¡¡<strong>kebabs</strong>!!?

Quedáis avisados, tíos buenos de Barcelona. Si sacáis un libro en público, tardarán en haceros una foto el mismo tiempo que en el que muere alguien en un capítulo de '<strong>Juego de tronos</strong>'. Hay toda una red de paparazis literarios en el transporte público. @hotdudesreadingbcn es de las pocas sucursales que abrieron con el reprís de la cuenta neoyorquina y que sigue activa dos años después. Han colgado más de 200 fotos para practicar 'voyeurismo' literario.

{"zeta-legacy-cite-barcelona":{"title":""Lo que te hace guapo es leer"","author":"A. T. (@hotdudesreadingbcn)"}}

Todo empezó como la cuenta original: «Con una broma», dicen. «Seguro que aquí no vamos a encontrar», se 'whasappearon'. Pero encontraron y los empezaron a colgar en Instagram. Aquí también hay moraleja: «La idea es que lo que te hace guapo es leer», dice uno de los ideólogos. Cinco trabajan en el mundo editorial.

{"zeta-legacy-image-100-barcelona":{"imageSrc":"https:\/\/estaticos.elperiodico.com\/resources\/jpg\/6\/6\/1500391713666.jpg","author":"JOAN PUIG","footer":"Dos paparazis de\u00a0@hotdudesreadingbcn posan tras sendas lecturas para mantener el anonimato.\u00a0"}}

Airean solo sus iniciales, como en los escándalos. «Pero sin tarjetas black», se ríe V. M. Ella, V. M., es periodista; él, A. T., trabaja en una editorial. Ejercen de portavoces del «comité editorial», se ríe ella. Son nueve: ocho chicas y un chico, de entre 31 y 38 años. Cinco trabajan en editoriales, tres son periodistas y una se dedica a la moda. Claro que tuvieron «el debate» antes de abrir la cuenta. «¿Estamos haciendo uso del hombre como objeto? -recuerda ella-. Pero el sentido final no es ese». ¿Su objetivo? «Destacar que leer te hace más interesante», responde él. «Nos hemos sumado al eslogan #ReadingIsSexy -dice la periodista-. Sí, es verdad, los tíos están buenos, pero también es verdad que ganan puntos con el libro en la mano». Suelen añadir coletilla sarcástica: «Reading is sexy if you are sexy» (leer es sexy si eres sexy).

POSADO DE VELENCOSO

Requisitos para ser un #hotdudereading: «Que esté leyendo un libro, no importa si es electrónico -responde V. M.-, que sea una foto pública y que no sea posada». Tienen una excepción: el modelo <strong>Andrés Velencoso</strong> posó con libro para ellos. Se les perdona.

Antes de publicar, hacen votaciones por Whatsapp. «Se ve que yo tengo un gusto mucho más gay», dice A. T. A su lado, V. M. asiente: «Nos ha hecho triunfar entre los gais. Creo que sigue siendo nuestro público mayoritario».

Salen jóvenes y maduritos, con barba 'hipster', rastas, aires de 'Top gun', incluso un cura. Los pillan en metros, buses, parques, terrazas, bancos, balcones, playas. Hasta han encontrado a #hotdudes con libro volviendo de fiesta en el metro a las dos de la mañana. A estas alturas, ya les entra complejo de paparazi. De momento, ningún tío bueno les ha pillado disimulando con el móvil en el aire. Tampoco se ha quejado ninguno al encontrarse en Instagram. «A todos los que se han reconocido les ha hecho gracia».

La cuenta mantiene formato 'amateur' (no hacen publicidad, tienen 1.400 seguidores). «La idea era esa -dice A. T.-.: fomentar la lectura sin sacar ningún tipo de… Bueno -se ríe-, indirectamente si la gente lee, ya me pagan el sueldo».