Tras el lado oscuro

David Prowse, que encarnó a Darth Vader en 'La guerra de las galaxias', presenta el documental de reivindicación 'I am your father'

David Prowse, el rostro oculto de Darth Vader, en Sitges.

David Prowse, el rostro oculto de Darth Vader, en Sitges.

JUAN MANUEL FREIRE / SITGES

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David Prowse no es un nombre que suene en todas las casas a la hora de comer. El de Darth Vader, en cambio, es más popular y suscita en todo el mundo reacciones parecidas; de pavor, de nostalgia, de admiración… Es el villano por excelencia de la cultura pop moderna.

Prowse y Vader son, en realidad, el mismo hombre. O al menos lo fueron hasta casi el final de la trilogía original de La guerra de las galaxias. El documentalLa guerra de las galaxias. I am your father es un homenaje al actor británico que dio cuerpo (aunque no voz) a la amenaza galáctica, al menos hasta que llegó la hora de verle el rostro.

En la escena de El retorno del jedi El retorno del jedien la que Luke quita el casco a su padre, se decidió (por motivos no del todo claros) emplear a otro actor, Sebastian Shaw. Lo que se llama deshonra. El documental estrenado en Sitges cuenta cómo el cineasta Marcos Cabotá llevó a buen puerto la idea de rodar de nuevo dicha escena, ahora con el protagonista original.

Prowse, de 79 años, ya visitó antes Sitges, en el 2004. Fue allí donde vio por primera vez a Cabotá, uno entre los muchos fans que quisieron conocer al hombre oculto bajo la máscara. El actor no duda ahora en llamar a Cabotá y Toni Bestard, codirectores de I am your father, «buenos amigos». La película es una labor de amor. Cada fotograma respira afecto por Prowse. No había ánimo de lucro, solo de corregir una injusticia histórica; y dar a conocer algo mejor el recorrido vital y artístico del homenajeado.

Antes que actor, David Prowse, de 1,96 de altura, fue campeón de levantamiento de pesas. Diagnosticado de artrosis reumatoide con 13 años, se sirvió de ese deporte para controlar los efectos de la enfermedad. «Había tratado de hacer culturismo», nos cuenta Prowse. «Pero era demasiado alto. No gané ninguna competición. Tampoco gané el concurso de Mr. Universo, en el que participé en 1960. ¡Son pequeñas espinas!».Su primer papel importante llegó en 1970, cuando encarnó a Frankenstein en la producción de la Hammer El horror de Frankenstein. «Con ellos rodé otras películas [El circo de los vampiros y Frankenstein y el monstruo del infierno, ésta del gran Terence Fisher]. Todas buenas, he de decir». Prowse puede vanagloriarse de haber rodado con otros grandes como Stanley Kubrick (era el guardaespaldas del Sr. Alexander en La naranja mecánica) y Terry Gilliam (La bestia del reino). «De Kubrick tengo grandes recuerdos. Después de rodar la película todavía seguimos en contacto».

Entrenador de Supermán

Pero si un papel le ha dado popularidad en su país, es el Green Cross Man, protagonista de una campaña de seguridad vial tan eficaz que le valió ser nombrado Miembro de la Orden del Imperio Británico. «Cuando voy a convenciones, la gente quiere fotos firmadas de Darth Vader, pero si la convención es en Inglaterra, es más común que pidan fotos del Green Cross Man». 

Otro apunte curioso: Prowse entrenó a Christopher Reeve para ser Superman. «Me llamaron del estudio para hablarme de la película y pensé que iban a ofrecerme el papel, pero querían que entrenara a Reeve. Debía esculpirlo en seis semanas, tampoco demasiado tiempo. Pero le puse un montón de peso en los lugares adecuados: pecho y brazos, sobre todo».