Saoirse Ronan: "Solo sé actuar, no valgo para nada más"

La actriz, que lleva delante de las cámaras desde los 12 años, aspira al Oscar de la mano del drama 'Brooklyn'

La actriz Saoirse Ronan, protagonista de 'Brooklyn'

La actriz Saoirse Ronan, protagonista de 'Brooklyn' / periodico

PAZ MATA / LOS ÁNGELES

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La hemos visto crecer delante de la pantalla. Tenía 13 años cuando recibió una nominación al Oscar a la mejor actriz de reparto por 'Expiación' (Joe Wright, 2007). De la mano de 'The lovely bones' (Peter Jackson, 2009) aspiró a un Bafta británico. Sin poder resistirse al cine de acción ('Hannah'), Saoirse (pronunciado, 'sor-cha') Ronan ha demostrado sensibilidad ('Mi vida ahora', Kevin Macdonald, 2013) y sentido del humor ('El gran hotel Budapest', Wes Anderson, 2014). A los 21 años, la actriz nacida en el Bronx y emigrada a Irlanda cuando tenía 6 años, ha dado con el papel que ha cambiado el rumbo de su carrera, Eilis Lacey, una joven irlandesa que en 1952 viaja a Nueva York buscando mejorar su vida. A su regreso a Irlanda, para asistir al funeral de un familiar cercano, Eilis se ve en la tesitura de elegir entre su nueva vida en Nueva York, incluido su floreciente romance con Tony, o quedarse en Irlanda a cuidar de su madre y casarse con Jim, su pretendiente. Dirigida por John Crowley, 'Brooklyn' le ha puesto en bandeja su segunda nominación al Oscar.

Lleva delante de las cámaras desde los 12 años. ¿Ha cambiado mucho su forma de actuar desde entonces? Lo sigo haciendo por instinto pero sí es cierto que ahora sé cómo usar lo que llevo dentro. Cuando eres niño, actuar es algo que no requiere ningún esfuerzo. No te sientes para nada inhibido, usas la imaginación y eres tú mismo. Eso es algo que no he querido perder, a pesar del paso de los años. Por otro lado no suelo investigar mucho sobre un papel ni trato de diseccionarlo, como hacen otros colegas de profesión. En ese sentido mi forma de trabajar no ha cambiado mucho desde que era una cría. 

¿Que ha significado 'Brooklyn'  para usted? He vuelto a trabajar con John Crowley, director a quien respeto y admiro. Una de las cosas que más me gusta de él como cineasta es la manera que tiene de rodar las escenas más emocionales. Además, la película está basada en una novela cuyo autor [el irlandés Colm Tóibín] tiene una forma de abordar los personajes femeninos que me encanta. Se trata de un papel muy especial porque la trayectoria vital de la protagonista es muy parecida a la mía. Si hablamos de personalidad o carácter, lo cierto es que no nos parecemos en nada, pero ambas nos encontramos en un momento de nuestras vidas muy parecido. De hecho a veces me ha resultado muy difícil separar a ambas, hasta el punto de pensar que no estaba actuando. 

¿Lo dice porque usted también emigró? Sí. Nací en Nueva York, pero cuando era pequeña, mis padres, que son irlandeses, decidieron regresar a su país y allí es donde he crecido. Debido a mi trabajo, he viajado mucho, aunque hasta que cumplí los 18 siempre he ido acompañada por mi madre y eso ayudó a no sentir tanta nostalgia como la protagonista de la película. Los irlandeses solemos marcharnos de nuestra tierra pero siempre terminamos volviendo, ya sea físicamente o emocionalmente. Yo he dejado el nido pero Irlanda siempre será mi hogar. Estoy muy orgullosa de mis raíces y me encanta que surgen proyectos como 'Brooklyn'.

¿Le hace su madre sentirse culpable por dejar su patria y su familia, como le sucede a su personaje? No, mi madre siempre me ha apoyado en todas mis decisiones.  Pero en el caso de Eilis eran otros tiempos, la vida era muy dura en Irlanda y había que emigrar para buscarse la vida. Mi madre también lo hizo, marchándose a Nueva York y eso fue una bomba para la familia y los amigos, todavía choca mucho eso de que uno deje su patria. Cuando me fui a vivir a Londres todos me decían: es por tu trabajo, ¿verdad? Lo mismo me dicen ahora que me he ido a vivir a Nueva York. 

{"zeta-legacy-phrase":{"name":"Saoirse Ronan","position":"ACTRIZ","text":"\"Los irlandeses solemos marcharnos de nuestra tierra pero siempre terminamos volviendo, ya sea f\u00edsicamente o emocionalmente\""}}

¿A quien acude cuando le entra la nostalgia? A mi madre, por supuesto. A mi tía Margaret, porque estoy muy unida a ella. Y a mi mejor amigo, Christopher, al que conozco desde que era pequeña. Yo soy hija única y él es como mi hermano. Cuando estoy con él todo se simplifica, nos peleamos como dos niños y también nos reímos el uno del otro. Él es el que hace que me mantenga con los pies en la tierra, sobre todo ahora porque con toda la atención que mi trabajo ha generado es fácil que se me suba el éxito a la cabeza. Por suerte tengo gente a mi alrededor que me baja los humos inmediatamente.

¿Que es para usted el éxito? Poder seguir haciendo lo que más me gusta y no tener que trabajar en otra cosa para ganarme la vida.  Actuar es mi pasión, no sé qué haría de no poder hacerlo, no valgo para nada más. Ni siquiera para vender en unos grandes almacenes como hace mi personaje.

¿Qué proyectos tiene entre manos? Voy a rodar una película titulada 'Loving Vincent', que narra cómo un joven está obsesionado con Van Gogh. Mi papel es pequeño y solo rodaré un par de días, pero adoro el proyecto. También tengo, aunque no hay fecha de rodaje, la adaptación de 'La gaviota', de Chéjov, que tendrá un reparto espectacular encabezado por Annette Bening. Y, además, una obra en Broadway, pero los ensayos empezarán el año que viene. No me puedo quejar de falta de trabajo.