La vigencia del genio de minnesota

Quintana y Batiste, tras el rastro de Bob Dylan

Los artistas estrenan mañana en el Ateneu 'Tornarem a ser lliures'

NÚRIA MARTORELL / Barcelona

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Se conocieron una noche de verano de 1997 en Sant Esteve d'en Bas (Garrotxa). Jordi Batiste acababa de ofrecer el último concierto que dio con el malogrado Ia Clua (como Ia & Batiste) y Gerard Quintana había cantado con músicos de Umpah-Pah. Y pronto, muy pronto, salió a relucir el nombre de Bob Dylan. «Coincidimos en una plaza y estuvimos hablando de las pasiones comunes, y resulta que una de ellas era el trovador de Minnesota. Así que empezamos a pasarnos traducciones que ambos habíamos hecho de sus canciones», relata Quintana. Al poco ya tenían montado un repertorio, se habían ido de gira y grabado un disco. Quince años después, retoman el proyecto añadiendo piezas nuevas que mañana y el sábado vestirán de largo en el Ateneu Barcelonès.

El título escogido para bautizar el espectáculo tiene un cariz esperanzador: 'Tornarem a ser lliures'. "Esta versión ya la hicimos con Sopa de Cabra en el disco 'Al·lucinosi', pero no la recogimos en 'Els miralls de Dylan' [el segundo compacto que publicaron juntos, ya de estudio, en el 2000], explica el cantante . "Dylan es para muchos un mesías, con un don especial, visionario y profético. Solo cabe coger frases sueltas de su 'All along the watchtower (Des de la talaia)', de 1967, para darse cuenta: 'Desde la atalaya los príncipes ven el mundo'. Y así es, los poderosos, el capitalismo salvaje lo sigue controlando todo desde arriba. Así que como Dylan espolea en esta letra, no podemos perder más tiempo. Esta canción es un himno para que la gente salga a la calle», asegura Batiste.

CONCIENCIAS ABIERTAS

Quintana asiente: "Es el momento necesario de mantener las conciencias abiertas. Y Dylan tiene esa privilegiada categoría de clásico: se podrá cantar de aquí a 400 años y no habrá perdido vigencia, igual que Shakespeare nos sigue explicando la condición humana a través de sus obras. Su mensaje es a menudo hosco. Sabe que nuestra especie es una mierda, que corremos una carrera sin fin, que somos meros depredadores, pero después está la capacidad de cada persona para amar; la libertad de cada individuo. Un país solo puede ser libre si las personas que lo integran tienen este espíritu", subraya.

Quintana Batiste se han prestado a que el acústico para EL PERIÓDICO sea con público. Y estrenan una adaptación que por la mañana aún retocaban: 'Campanes de llibertad (Chrimes of freedom)'. "Será con la que abriremos el recital -adelantan- porque tiene algo de himno, de proclama de los desgraciados, los maltratados, los que se han quedado en la cuneta". Los asistentes aplauden entregados y son recompensados con otra canción, 'Tornarem a ser lliures' "Esta experiencia ha sido un lujo, sin trampas ni efectos, todo muy puro", describe Quintana feliz.