LOS AGENTES DE LA T.I.A. BUSCAN ESPÍAS

Método Mortadelo

El último álbum de Ibáñez está dedicado al espionaje y a las escuchas con micros ocultos, con escena en un restaurante incluida

No hay micrófonos en los floreros de la mesa, pero sí en otros sitios.

No hay micrófonos en los floreros de la mesa, pero sí en otros sitios.

ERNEST ALÓS
BARCELONA

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Latrama de espionaje de políticos catalanes por los detectives deMétodo 3y los debates sobre si el micrófono delrestaurante La Camarga estaba o no en un florero parecen, a veces, solo a veces, de chiste. De viñeta deMortadelo y Filemón, en concreto. Algo en lo que está de acuerdoFrancisco Ibáñez, el padre de los dementes agentes de la T.I.A. "Me tendrían que dar el carnet de vidente, de pitoniso o de oráculo", bromeaba ayer en su casa. Y es que en el último álbum publicado porEdiciones Ben castellano y catalán, antes de Navidad ('¡Espías!' / 'Espies!'), Mortadelo y Filemón aparecen persiguiendo a un espía que opera en un restaurante de postín ('El Bollo' / 'El Bullo') , y por todas partes surgenmicrófonos escondidos por una red de escuchas ilegales: en una cafetera, en un wáter, en el cuerno de una cabra, en un confesionario...

Rubalcaba y Rajoy

El episodio del restaurante, ay, no va de espionaje político --"¡No me pidas tanto, hombre!", protesta-- pero en otros las víctimas sí son políticos.Rubalcaba y Rajoy, en concreto. Ibáñez no recuerda si la idea le surgió de un caso anterior, el del juego sucio en el PP de Madrid, pero todo podría ser. "Siempre me inspiro en temas de rabiosísima actualidad... ¡pero esta vez me adelanté!", dice. Por cierto, en un tebeo sobre la huida de Roldán, la T.I.A. adivinaba dónde estaba escondido el exdirector de la Guardia Civil. "Lo señalaban en un mapa. También lo acerté. Bueno, realmente, el círculo iba de Nueva Zelanda a las Kuriles...".

Ayer, Ibáñez estaba "atado al tablero" dibujando su próximo álbum, '¡¡Broommm!!' Va de motociclismo. "Ya hice uno de fórmula 1, otro de ciclismo...", explica. ¿Y había dopaje? "No sé, lo tendría que mirar. Es que como los hago como una metralleta, cuando acabo uno me olvido de él para que no se me mezclen los chistes". A lo mejor algo se tomaban. Aunque fuesen transfusiones de sulfato atómico.