Un premio para crear cultura

La Fundació Carulla apoyará con 100.000 euros proyectos innovadores en el campo cultural

ERNEST ALÓS / BARCELONA

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Hace unos días, ocho grandes empresas catalanas constituyeron la Fundació Catalunya Cultura, para recaudar recursos que impulsen proyectos de emprendedores y creadores en el ámbito cultural. Esa misma filosofía inspira la nueva orientación de uno de los premios de la muy veterana Fundación Lluís Carulla, que también cambiará de nombre para denominarse a partir de ahora Fundació Carulla, para identificar las iniciativas de mecenazgo con el conjunto de la famila propietaria del grupo Agrolimen.

La presidenta y el director de la fundación, Mariona Carulla y Carles Duarte, informaron ayer de que el premio de honor de la fundación (con un perfil poco diferenciado, por ejemplo, del Premi d'Honor de Òmnium) pasará, con una dotación de hasta 100.000 euros, el doble de la actual, a denominarse Premi Lluís Carulla y a premiar «proyectos culturales en los diversos ámbitos de la lengua catalana, las artes y el pensamiento» que necesiten un impulso económico y que «constituyan una aportación innovadora que contribuya a reforzar y modernizar la cultura y la sociedad catalanas».

«Se trata de mirar al futuro, de aplicar la lógica del apoyo a las start-up en el sector empresarial al sector cultural», explico ayer Jordi Carulla, uno de los tres miembros de la tercera generación de la familia que se integrarán en el jurado. La concesión del premio implicará la contitución de un contrato con la fundación para llevar a cabo el proyecto.

Aparte del nuevo galardón, la fundación mantendrá el resto de sus actividades, como los premios Baldiri Reixac, Francesc Candel, de Actuació Cívica y de Educació en el Lleure, además de el Observatori dels Valors, la editorial Barcino y el Museu de la Vida Rural.