LA ACLAMADA PRODUCCIÓN LLEGA AL LICEU

Persiguiendo a Jean Valjean

El catalán Ignasi Vidal da vida al impecable policía Javert en el musical 'Los miserables'

Javert y Cosette 8 Ignasi Vidal y su hija, Martina, que también interviene en el musical, anteayer en Barcelona.

Javert y Cosette 8 Ignasi Vidal y su hija, Martina, que también interviene en el musical, anteayer en Barcelona.

IMMA FERNÁNDEZ
BARCELONA

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Es el impecable policía Javert, el malo de Los miserables para el imaginario colectivo. Pero Ignasi Vidal, el actor catalán que le da vida en la celebrada producción que regresa hoy a Barcelona -al Liceu, hasta el 3 de agosto- le ve otros matices. «Si todos los funcionarios públicos fueran como Javert, no habría corrupción», sentencia. He ahí el dilema que suscita un personaje obsesionado con dar caza al exconvicto Jean Valjean en el clásico de Victor Hugo. «Desde su conciencia de cumplir estrictamente la ley es un héroe. El problema es que a veces es injusta y él eso no lo contempla. Amar un personaje por sus virtudes es lo fácil; lo complejo es amarlo por sus debilidades».

Ignasi Vidal (Barcelona, 1973) llega con su hija Martina, que le acompaña sobre el escenario en el papel de la huérfana y desgraciada Cosette. A sus 9 años, pese al sufrido papel, se lo pasa en grande. «Es como un juego y me encanta. Yo quiero ser actriz y cantante. También hice La bella y la bestia», dice la pequeña, nacida en Sevilla y superfan del Barça. «A los 6 años para Reyes le pedí a mi padre que me hiciera socia».

El actor y cantante se ha suicidado ya, para esta ficción, más de 500 veces y continuará haciéndolo en la gira que seguirá a su debut en el Liceu. «Para mí actuar aquí es algo bestial, el mayor acontecimiento de mi carrera. Yo soy del Raval y nunca imaginé que algún día lo pisaría». No lo hará el argentino Gerónimo Rauch, el protagonista del montaje que llegó al BTM, que anda triunfando en Londres con El fantasma de la ópera. Le sustituyen Nicolás Martinelli y Felipe Forastiere.

Hijo del empresario teatral Ignacio Vidal, el actor se crió entre los bastidores del Apolo, pero se marchó a Sevilla y ha desarrollado su carrera en Madrid. En la televisión y el cine, además del teatro, donde protagonizó Rent, La bella y la bestia y fue Judas en Jesucristo Superstar.

También músico, tiene una banda de rock, una productora teatral (Excéntrica Producciones) y una nueva faceta a la que está entregado con pasión: la dramaturgia. La próxima temporada se estrenará como autor en los Teatros del Canal de Madrid con La dignidad, «un vistazo a la vida interna de los partidos políticos, al funcionamiento de la democracia en Occidente».

«Están a punto de cargarse el cine, pero el teatro sobrevivirá siempre», afirma Vidal, que volviendo a su pasión culé celebra que Xavi se quede en el Barça. «Es el Puccini del fútbol. Cambió la manera de jugar. Un auténtico revolucionario»