Delicias panamericanas

CRÓNICA Paquito D'Rivera llevó a Jamboree un sinfín de ritmos latinos

ROGER ROCA / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pregunta de matemáticas: ¿cuántos ritmos distintos produce la combinación de un músico cubano y un grupo brasileño de jazz? Si los músicos son el clarinetista y saxofonista Paquito D'Rivera y el Trio Corrente, la respuesta es más bien de geografía: casi tantos como ritmos distintos hay entre el Caribe y el Cabo de Hornos. El martes, en la primera de sus cuatro noches en el Jamboree, D'Rivera y el Trio Corrente presentaban su premiado Song for Maura, un álbum con acento brasileño y cubano pero que en directo desbordó con mucho las fronteras musicales de esos países de origen. En una noche amena -porque con Paquito D'Rivera, showman incontenible, debe ser ameno hasta un funeral de estado- sonaron, por lo pronto: un chorinho, una bossanova convertida en filigrana rítmica por el portentoso trío, un guarapo venezolano, un frevo de Pernanbuco y el cha-cha-chá Oye cómo va, que sirvió a D'Rivera para contar una anécdota sobre cómo Tito Puente pagó su mansión.

Todo, menos el bis, arreglado al milímetro, y absolutamente todo tocado con la facilidad y la ligereza del que lleva dentro esos compases. Y dio la impresión de que no hubo más ritmos porque en un pase de hora y cuarto larga no da tiempo a más. Hoy y mañana, D'Rivera y sus socios del sur siguen en el Jamboree. A dos pases por noche son cuatro conciertos. ¿Cuántos ritmos pueden llegar a sonar?