'Le nozze di Figaro' vuelve al Liceu

El Liceu este lunes repone por tercera y última vez la deliciosa versión de 'Le nozze di Figaro', ópera bufa de Mozart, que Lluís Pasqual ambienta en los años 30 con una despejada escenografía de Paco Azorín. Kyle Ketelsen, bajo-barítono, repite en el rol de Figaro, que ya bordó en su debut en el Liceu en el 2008. La reposición cuenta un reparto equilibrado, joven y de calidad, para insuflar vida a esta ópera basada en un texto teatral de Beaumarchais que denunciaba los abusos de poder de un conde que actuaba como rival amoroso de su propio sirviente.

La soprano alemana Mocca Edmann debuta en el Liceu encarnando a la criada Susanna, novia de Figaro y objeto de deseo del Conde de Almaviva. Se alternará en el rol con Elena Copons, que asume por primera vez el papel. Aunque solo lo representará el 10 y 20 de noviembre, Copons está entusiasmada con su debut como Susanna. "Es un personaje exigente, que canta casi todos los actos y es esencial conocer perfectamente el libreto para entender su psicología, en qué momento está y qué tipo de relación mantiene con uno de los personajes", ha resaltado la soprano de Terrassa en la presentación del montaje. "Es todo un honor que hayan confiado en mí para este papel. Me siento arropada por el Liceu y encantada de formar parte de una producción de este nivel".

La Condesa de Almaviva será Anett Frischt en sustitución de la anunciada Olga Mykytenko, baja por enfermedad. Y el Conde de Almaviva será Gyula Orendt, otro debutante en el Liceu. La experimentada mezzo Anna Bonitatibus, otro debut en el Gran Teatre, y Gemma Coma-Alabert serán Cherubino. La mezzo Maria Riccarda Wesseling. como Marcelina, también se dará a conocer en el el Gran Teatre. 

BAILE DE RELACIONES

Pasqual, a través de su asistente Leo Castaldi, ha hecho una puesta al día del montaje sin cambiar gran cosa de los anteriores del 2008 y 2012. Su visión resalta "la fuerza y la complicidad de las mujeres" en esta obra, así como "el baile de relaciones, intrigas y emociones de esta obra maestra a dos bandas creada por Mozart y Da Ponte a partir del transgresor texto de Beaumarchais", explicó a través de un escrito, al hallarse indispuesto el día de la rueda de prensa.

Su ausencia se hizo notar, sobre todo después de unas polémicas declaraciones realizadas el pasado verano. En ellas criticó el enome dispendio que supone el Liceu y comparó el género operístico con "un arte de anticuario, una cómoda del siglo XIX".  

Precisamente esta temporada el público podrá comparar la ópera de Mozart y la obra de teatro de Beaumarchais. El Teatre Lliure recuperará en diciembre la emblemática producción de Fabià Puigserver de 'Les noces de Fígaro', interpretada entre otros por Lluís Homar, ahora responsable de dirección. Y la Filmoteca programará 'Beaumarchais, l’insolent' el 8 de noviembre para completar la visión del autor de esta famosa obra cuyo estreno en París en 1784 provocó su encarcelamiento. 

OBRA MAESTRA

La ópera de Mozart, que se vio por primera vez a escena en el Burgtheater de Viena en 1847, es una obra maestra. "Pocas veces antes de Mozart con tan poco se había dicho tanto", destacó Josep Pons, director de la Orquestra del Gran Teatre del Liceu que capitaneará su formación desde el foso. "En el barroco la ópera era mucho más compleja en sus formas y lenguaje. En el clasicismo todo se simplifica y se concentra en las articulaciones y los pequeños cambios. Con esta economía de gestos se expresan todos los sentimientos".