Pantallas

Trump y los 'movinautas'

MIKEL LEJARZA

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Hace un año, pensar que Donald Trump podría llegar a ser presidente de EEUU sonaba a chiste, pero visto lo que está ocurriendo cabe preguntarse si lo que nos acontece es lo que sustenta el guion de los programas informativos o es al revés y estamos viviendo tiempos de realidad inventada.

Después de años en los que las audiencias de los espacios informativos descendían sin parar, en la última temporada en EEUU, que ayuda a prever acontecimientos más cercanos, la tendencia ha cambiado en lo que se refiere a los canales especializados en la información. Los analistas lo atribuyen a la campaña electoral y puede que sea así, pero los datos son contundentes. El primer debate de los candidatos republicanos fue el acontecimiento de mayor audiencia de la tele por cable con exclusión del deporte; el canal Fox ha sido el segundo entre todos los canales con publicidad del cable en un año en que ha conseguido su récord de seguidores y la CNN ha crecido un 39%, consiguiendo su mejor resultado en los últimos siete años.

No es un fenómeno ajeno a nosotros, aquí, los debates de la última campaña han alcanzado y superado incluso las audiencias de los eventos deportivos más masivos. Sin embargo, no todo es igual. La MSNBC ha perdido audiencia. Se trata de la única cadena que ha apostado más por dar noticias de rabiosa actualidad, frente a los debates y tertulias en las que prima el espectáculo.

El dato contrasta con el hecho de que los informativos de su cadena en abierto, la NBC, continúan liderando la oferta de las cadenas generalistas, aunque con menor ventaja que en años anteriores. Sin embargo, las tres grandes cadenas ven como sus televidentes entre 25 y 54 años que siguen los informativos de la noche, continúan disminuyendo año tras año, el último un 4%.

Ocurre algo similar con los magacines matinales, donde solo la CBS ha mejorado sus resultados. En los últimos meses ha habido un intenso debate entre quienes defendían un estilo más desenfadado y alegre (ABC), frente a uno más serio y tradicional (NBC) a la hora de dirigirse al público, pero ambos canales han perdido audiencia frente a la CBS que ha apostado más por tener entrevistas exclusivas y noticias, que por los aspectos formales.

Ganan, por tanto, los debates en los canales temáticos dedicados a la información; y lo hacen los informativos con noticias propias en los generalistas. Es el mundo al revés, los especialistas en información se ponen en manos del entretenimiento y los generalistas buscan noticias.

Y todo esto ocurre en un panorama donde los smartphones permiten captar en tiempo real cualquier acontecimiento. Son los movinautas, el periodismo móvil. La RTV Suiza ha creado el proyecto Exils: un periodista, Nicolae Schiau, ha seguido a cinco refugiados desde la frontera siria hacia Europa, mientras contaba su periplo en tiempo real con un teléfono y una pequeña cámara. La BBC ha distribuido 3.000 móviles entre sus periodistas y ha creado una aplicación para captar sonido e imagen con el objetivo de crear reportajes adaptados al uso de los teléfonos inteligentes. Lo real, inventado o no, nunca ha estado tan cerca.