Marilia Samper retrata a los excluidos en 'L'alegria'

Apostar por la dramaturgia contemporánea es el objetivo de la Sala Beckett que esta temporada apuesta fuerte por autores locales. 'Pool (no water)', de Mark Ravenhill, es el único montaje de autor extranjero no visto en Barcelona que subirá a escena, tras estrenarse en Fira Tàrrega con una original puesta en escena de Íntims Produccions.

'L'alegria', de Marilia Samper, acaba de abrir la segunda temporada del teatro desde su traslado a Poblenou. Se trata de un drama protagonizado por un potente reparto con Lluïsa Castell, Montse Guallar, Andrés Herrera y Alejandro Bordanove. "Habla de gente obrera, gente sobre la que se escribe poco teatro últimamente. Se abarca más la realidad de la clase media y alta. Existe cierta segregación velada hacia esa gente con dificultades para llegar a fin de mes. Hay situaciones duras, muy cerca, que no queremos ver", ha confesado Samper, que elaboró la pieza la temporada pasada mientras era residente en la Beckett.

La autora de 'La sombra de mi lado', 'F3dra Pleasure and Pain' y 'Dos punkis y un vespino' es fan del cine social de Ken Loach. Como él, huye del sentimentalismo en esta pieza para mostrar la fuerza de una madre sin recursos (Lluïsa Castell) acostumbrada a superar todo tipo de obstáculos. El título de la obra hace referencia a la actitud vital de esta madre coraje que intenta salir adelante junto a Eli (Alejandro Bordanove), su hijo de 20 años, con parálisis cerebral y en silla de ruedas. Por él se enfrentará a sus vecinos, gente con prioridades más urgentes que construir una rampa exterior en el edificio, indispensable para ella y su hijo. "Hay una reflexión sobre el tejido comunitario", afirma Samper.

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'L’alegria' forma parte de un ciclo sobre ciencia y creación contemporánea centrado en el cerebro humano que incluye también la reposición del montaje del añorado Moises Maicas 'Psicosi de les 4.48', de Sarah Kane (del 2 al 11 de noviembre), y la lectura dramatizada de 'Instruccions per a un govern socialista que vulgui abolir el Nadal', de Michael Mackenzie (6 de noviembre).

Contra la uniformidad

Esta temporada la Beckett huye de la uniformidad y el conformismo con montajes llenos de preguntas como 'Aüc', una aclamada producción'Aüc' de Les Impuxibles (días 21 y 22) y el estreno de 'Els nens desagraïts', una obra sobre religión de Llàtzer Garcia, una coproducción con la compañía Arcadia, residente en la Beckett, que cierra la trilogía sobre la familia, después de 'La terra oblidada' y 'La pols'.

Els Malnascuts, laboratorio de teatro joven de La Beckett, repondrá 'Like si lloras', de Xavi Gamito, Elena Martín y Anna Serrano. También se recuperará 'Tender Napalm''Tender Napalm', de Philip Ridlye. Esta creación mixta de circo y teatro de Sixto Paz volverá en Navidad y coincidirá con la reposición de dos obras de Clàudia Cedó: 'Tortugues' y 'L'home sense veu'. "Será una manera de dar a conocer a la autora residente de esta temporada y un reconocimiento al trabajo de la Sala Flayhard", destacó Toni Casares, director de la Beckett.

Tomando el pulso a los debates ciudadanos, a principios del 2018 se estrenará 'Olvidémonos de ser turistas', lo más nuevo de Josep Maria Miró. El autor de obras como 'El principi d'Arquimedes' será objeto de un ciclo que recuperará 'Nerium Park', una pieza suya poco vista en Barcelona sobre la crisis inmobiliaria.

A final de temporada Los Montoya, otra compañía residente en la Beckett con la que Ivan Morales quiere dirigirse a las nuevas generaciones, estrenará 'Esmorza amb mí'. "Habla no solo de con quien te vas a la cama sino con quien desayunas", afirma Morales, el autor, que actualmente triunfa como director de escena en La Villarroel con 'La calavera de Connemara'.