"Donde hay vida hay librerías"

Cinco editoriales independientes, agrupadas en el grupo Contexto, publicaron hace dos años el primer mapa de librerías de Madrid, inspirándose en uno similar que el editor Enrique Redel (Impedimenta) se había traído de Londres. Recogieron 122, y solo utilizaron en el plano el centro de la ciudad, porque en el extrarradio de Madrid, librerías, pocas. Ahora han repetido la experiencia, con un mapa de Barcelona del que distribuirán 30.000 ejemplares por las librerías de la ciudad. Han vuelto a salir, de nuevo 122 librerías, por pura casualidad. Eso sí, han tenido que reproducir toda la geografía de la ciudad de Barcelona y lamentan no haber podido incluir, ya que el tamaño habría pasado a ser inmanejable, ciudades contiguas como Badalona, Santa Coloma y L'Hospitalet.

Primera conclusión: con 122 librerías por 1,6 millones de habitantes, el tejido librero del municipio de Barcelona es más denso que el de Madrid, con la misma cifra de puntos de venta para 3,1 millones de habitantes. Segunda, está mucho mejor distribuido por los barrios, con escasas zonas desiertas como Horta, Sant Martí y la la zona alta con la excepción del centro de Sarrià, mientras que en Madrid se produce una insana acumulación en el centro. "En mi barrio, San Sebastián, con 50.000 habitantes, ya no hay librería. Pero porque no hay vida de barrio tampoco. Solo hay vida, y librerías, en el centro de Madrid. Y donde hay vida, hay librerías", explica el editor de Nórdica Diego Moreno.

La iniciativa ha partido de un grupo de editoriales formado por Impedimenta, Nórdica, Periférica, Sexto Piso y Asteroide, tres de Madrid, una de Cáceres y una, Asteriode, de Barcelona, con el apoyo económico del Ministerio de Cultura, que no del Ayuntamiento de Barcelona ni de la Generalitat. Institución que precisamente este jueves presenta la radiografía de las librerías de toda Catalunya, en colaboración con el Gremi de Llibreters. Un estudio que no se realizaba desde hace nueve años y que supone un análisis del sector que no tiene detrás el mapa de Contexto.

Este tiene, no obstante, la intención de reconocer la labor de los libreros a favor de las editoriales independientes (y, se supone, dar a conocer a estas en todas las librerías que no frecuentan sus catálogos) y de sugerir una forma de conocer la ciudad en un itinerario de librería en librería. La selección de las 122 librerías no es exhaustiva: prima aquellas donde tiene cabida la literarura, no incluye las de segunda mano ni las abiertamente especializadas e incluye las librerías-papelería con mayor vocación librera, una apreciación subjetiva que puede dejar fuera algún punto de venta significativo.