«Barcelona es una plaza difícil»

Entrevista con el cantautor madrileño Luis Ramiro, que este sábado actúa en Luz de Gas, dentro de Barnasants

El cantautor madrileño Luis Ramiro, que hoy actúa en Luz de Gas.

El cantautor madrileño Luis Ramiro, que hoy actúa en Luz de Gas.

JORDI BIANCIOTTO
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El trovador madrileño acude este sábado a Barnasants para mostrar el cancionero confesional de su cuarto disco, ‘El monstruo del armario’ (Luz de Gas, 21.00 horas). 

-Acudió al micromecenazgo para financiar su último trabajo y consiguió casi 24.000 euros, el doble de lo que necesitaba. ¿Marca ese método el camino a seguir?

-Quizá, porque las multinacionales ya no invierten y te lo tienes que hacer tú. Si tienes un público fiel te puede ir bien. El problema es que un disco bien hecho vale dinero y la gente no puede trabajar gratis.

-¿Se empieza a entender eso?

-Depende de quién. Nosotros no vamos explicando lo que ganamos y la gente se sorprende cuando dices lo que te quedas de un concierto.

-¿Cómo se crea ese público fiel?

-Llevando muchos años. Yo ya llevo 16 o 17 dando conciertos, grabando primero maquetas y luego discos. Empecé como bajista en un grupo de metal, luego otro pop, otro de fusión de rock y rumba... Terminé de cantautor un poco por casualidad.

-¿Por casualidad?

-Sí, porque grabé una maqueta para que no se perdieran mis canciones, un amigo me animó a presentarme a un concurso de cantautores y lo gané. Eso me dio ánimos.

-Tocó muchos estilos y eso se refleja en su nuevo disco, donde hay folk-rock, pop, aires latinos...

-Sí, me gusta ir por encima de los géneros. No soy un cantautor clásico.

-Su primer disco lo produjeron Pancho Varona y Antonio García de Diego, y en este cuenta con Aute. ¿Le inspiran los cantautores clásicos?

-Sabina y Aute siempre me han gustado. Aute es un referente. Aquí tendemos a olvidar a nuestras grandes figuras. Tendríamos que aprender de Estados Unidos y el Reino Unido.

-¿Siente que ha ido construyendo un público en Barcelona?

-Sí, aunque Barcelona para los cantautores es una plaza difícil, aunque parezca raro. Tira más hacia el indie y las últimas tendencias. Quizá es que es muy moderna y la etiqueta de cantautor suena antigua.