Hermanos Cubero, folclore de combate

"Es la tarea y cómo se hace". El verso de la canción 'Arte y orgullo', que da título al nuevo disco de los Hermanos Cubero, sintetiza con imbatible economía de palabras el discurso musical y ético de este dúo de músicos alcarreños (nacidos "y criados" en Guadalajara, subrayan) que llevan dos décadas residiendo en Barcelona y alrededores y han convertido su particular mezcla de folclore castellano y bluegrass de los Apalaches en un eficaz ariete contra los prejuicios y las fronteras estilísticas. 'Arte y orgullo' es su tercer álbum, y en él han cambiado las visiones más o menos idealizadas de su tierra de origen por un discurso político, inequívocamente situado a la izquierda, que combina sabiamente la denuncia y la imagen poética. Este sábado lo presentan en el Casinet d’Hostafrancs, en el marco del combativo festival Barnasants.Barnasants

"Eso ha sido una coincidencia", explica Roberto Ruiz Cubero, mandolina y segunda voz. "Cuando nos hicieron la propuesta de Barnasants, nadie sabía que teníamos este disco con estas letras. Las piezas se han ido encajando un poco por casualidad". Quizá los promotores de la muestra supieron ver algo que a los propios Cubero les pasaba desapercibido. "Fernando Pomares, el director de 'La muerte en la Alcarria' [estimulante documental protagonizado por el dúo que se presentó en la última edición del festival Beefeater In-edit], nos dijo que le parecía, por nuestros anteriores discos, que teníamos mucha tendencia a la izquierda. Y eso nos sorprendió, porque no éramos conscientes de que eso se transmitiera", apunta Enrique Ruiz Cubero, voz y guitarra.

LETRAS EN LA BASURA

Aun sin ellos saberlo, algo de eso sí transmitían a través de unas canciones con raíces profundas que reivindicaban una manera distinta de relacionarse con el entorno y de estar en el mundo. De esa mirada nacieron los álbumes 'Cordaineros de la Alcarria' (2010) y 'Flor de canciones' (2013). Ahora, en 'Arte y orgullo' (distribuido por El Segell del Primavera, que los ha fichado para su escudería), la toma de posición se ha hecho mucho más explícita. "Queríamos hablar de lo que nos rodea –explica Enrique-, lo que estamos viviendo, la crisis económica y política… Llevábamos ya bastante tiempo deseando hacerlo, pero hemos tirado a la basura muchas letras en esa línea porque les faltaba algo".

A las que finalmente han entrado en el disco no les falta nada. Desde '¿Quién electrificaría su alma?', que abre el álbum a modo de declaración de intenciones, hasta la imponente 'Maldita urraca' ("esas son mis tres armas para cazarte / dignidad y trabajo y este cante") y la amarga 'Trabajando en la MCA', con su guiño a Lynyrd Skynyrd y su cuestionamiento del papel de los grandes sindicatos ("si la unión hace la fuerza / dime quién se une a los lobos"), 'Arte y orgullo' esta lleno de himnos para ser cantados tanto en fiestas populares como en ateneos obreros. El Casinet d’Hostafrancs y el festival Barnasants se antojan un marco ideal para echarlos a andar.